Khadija, la joven violada por 13 jóvenes, asegura que «le han hecho sufrir muchísimo»

La víctima habla por primera vez en una entrevista para explicar cómo sucedieron los hechos

Uno de los tatuajes que los agresores le hicieron a la víctima Chouf Tv

ABC

Tras las noticias de la menor de 17 años secuestrada, violada y torturada por un grupo de trece jóvenes en un pueblo de Marruecos, la prensa ya encuentra similitudes con el caso español de «La Manada». El caso fue denunciado por la «Asociación para el desafío de la igualdad y la ciudadanía». De los agresores, ocho han sido detenidos y cinco se encuentran en búsqueda y captura.

Por primera vez la víctima ha hablado con los medios para explicar cómo ocurrieron los hechos, las primeras palabras han sido con una entrevista al canal marroquí «ChoufTv».

La menor relata que fue «retenida durante dos meses en un recinto», mientras que los jóvenes se turnaron para violarla . También usaron cigarrillos para quemarle el cuerpo y le hicieron cortes en distintos sitios de su piel, con el uso de herramientas punzantes, llegando hasta tatuarle una esvástica en la mano de la víctima.

Los hechos

Khadija, fue raptada mientras hablaba con su prima en casa de su tia, durante las vacaciones. La conversación fue interrumpida por los secuestradores, que utilizaron un cuchillo para raptar a la víctima. Ella no conocía de nada a sus agresores y fueron éstos, la que la vendieron por dinero a otros hombres.

«Primero me violó uno de ellos y luego fueron turnándose. Me tatuaron en todo el cuerpo. Me desperté con dolor en los brazos y los tenía hinchados, no estaba consciente cuando me hicieron los tatuajes», narró la víctima durante la entrevista. «Traté de escapar varias veces, pero siempre me atrapaban y me golpeaban. Me torturaron, no me dieron ni comida ni bebida, y ni siquiera tenía derecho a tomar una ducha. Lloraba sin parar», menciona Khadija.

El objetivo de la joven es que se haga justicia y que los agresores, a los que considera «un grupo criminal muy peligroso», paguen lo que han hecho, ya que «le han hecho sufrir muchísimo». También mostró a las cámaras las marcas que le habían producido en su cuerpo además de los tatuajes.

Khadija viene de una familia modesta. Es la mayor de tres hermanos y vive con su familia en la aldea de Oulad Ayad, cerca de Fqih Ben Salah. Su familia también ha hablado a los medios marroquís, su padre, Mohamed A, ha asegurado al medio «alaw9at» que «no se puede imaginar lo que su hija sufrió con esa banda de delincuentes».

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación