OPINIÓN

Talasofobia

Una palabra que lo que viene a significar es miedo a grandes masas de aguas profundas

15/07/2025 a las 06:28h.

He de reconocer que hace una semana, antes de escribir este artículo, no conocía el significado de la palabra que lo titula. Ni si quiera sabía que existía. Tras leer una noticia que avisaba de que los datos reales de empleo en España están siendo ... ocultados, quise hacer un hilo para X (antes Twitter) sobre la cantidad de realidades que el Gobierno tenía ocultas y que en algún momento de descubrirán.

Metafóricamente lo quise comparar con esos misterios ocultos y desagradables sorpresas que guarda en ocasiones el fondo del mar o de un lago, que por Principio de Arquímedes, en un momento dado experimentan un empuje hacia la superficie. Buscando una imagen que expresara eso para rematar el hilo, descubrí esta palabra «talasofobia».

Una palabra que lo que viene a significar es miedo a grandes masas de aguas, sobre todo si tienen profundidad. Muy relacionado con el temor a lo desconocido bajo esas «profundidades». Una palabra que se ajusta muy bien para describir la situación política que vive España actualmente.

No porque Pedro Sánchez se haya comparado con un capitán de barco que, en caso de serlo, sería el capitán del «Holandés Errante» de Piratas del Caribe, con él convertido en una especie de David Jones cuyo corazón es su supervivencia en el Palacio de la Moncloa. La palabra se ajusta bien a este artículo porque cualquier persona normal es lógico que presente «talasofobia» ante el mar de escándalos del Gobierno que tenemos delante.

Y no solo ante los que se ven desde la superficie, sino también a los que hay en las zonas abisales y en las fosas que emergen cada día: «peces fontaneros», pirañas que «muerden comisiones», tiburones que sacan la sangre y la carne a España troceándola para sobrevivir, y otras muchas especies terroríficas que no conocemos. Las imágenes que los submarinos modelo UCO nos envían hacen pensar que, cuanto más profundo se sumerjan, más sorpresas encontrarán.

Hacer que esas aguas sean seguras en algún momento va a ser una tarea muy difícil. No hay que tener miedo, pero ser muy conscientes de que el fondo es oscuro y desconocido, asumir que cualquier cosa puede emerger en cualquier momento.

Sin embargo, aunque los que están acostumbrados a navegar en aguas más cristalinas puedan sentir inquietud por lo que se puedan encontrar más abajo, no olvidemos que, realmente deberían ser los que andan errantes por esas aguas turbias y revueltas los que deben tener verdadera «talasofobia». Y es que, en cualquier instante, un «ser» marino de las profundidades, alguno que, incluso, vieron crecer, los puede acabar devorando. En ese momento, el capitán, no podrá evitar que el barco se hunda, porque éste habrá quebrado ya por completo. Es decir, haciendo un guiño al día que celebramos mañana: ni la Virgen del Carmen, en ese momento, podrá salvarles.