Opinión
Sí, soy facha
Lo soy por creer que la política está para hacer el bien a los ciudadanos, para luchar por mejoras sociales, económicas y vitales de quienes componemos esta cosa nuestra de país
Si quien no está con Pedro Sánchez, es facha: sí, lo soy. Lo soy si eso supone estar junto a la democracia, y alejado del Partido Hipócrita Socialista Español. Lejos de quienes se llenan la boca hablando de feminismo y honradez y luego se reparten ... a mujeres (prostitutas, se ve que esto es algo en lo que andan ERE que ERE) como si fueran caramelos. Así que si estar lejos de la hipocresía, el machismo más rancio y la cosificación de la mujer es de fachas: pues sí, lo soy.
Si ser facha es creer que en la política se está como un servicio público y no como una suerte de Gran Hermano VIP parlamentario en el que pegar el pelotazo: sí, soy facha. Lo soy por creer que la política está para hacer el bien a los ciudadanos, para luchar por mejoras sociales, económicas y vitales de quienes componemos esta cosa nuestra de país.
Un país en el que muchos pasan hambre, con sueldos irrisorios y currículos kilométricos, mientras mindundis sin más formación que lamerles las botas a ciertos hombres poderosos, alcanzan puestos de poder. Si creer en la importancia del esfuerzo y la formación para llegar a conseguir un trabajo es de fachas: sí, lo soy.
Soy facha por no aceptar que un presidente nefasto deba seguir al frente del gobierno. Soy facha por pensar que, si no se enteró de lo que hacían los suyos, es un inepto; y si se enteró y miró para otro lado, es un corrupto. O ladrón o tonto útil, y en ninguno de los dos casos válido para seguir al frente de este país.
No lo es desde el momento en el que apareció el nombre de su hermano, su mujer, sus dos hombres de confianza, el tercero del Peugeot y cada vez más gente, en papeles de la UCO y en investigaciones judiciales. Demostró que tenía que haberse ido al tomar unos días de reflexión, lo ha vuelto a demostrar terminando una rueda de prensa (controlada y en la sede del partido) con un «aun no he comido».
Así que sí, debo ser facha. Y debo serlo de libro. Un facha completo por creer que otra política es posible y que el sanchismo es nuestro gran cáncer social.