Opinión

Se estrena 42 segundos

El deporte y el cine no han tenido una buena relación

El deporte y el cine no han tenido una buena relación. Claro está si obviamos al boxeo, casi un subgénero dentro de la cinematografía, con filmes excelentes como 'Mas dura será la caída', 'Cuerpo y alma', 'Fat city' o 'Toro salvaje'. 'Rocky' con siete secuelas fue todo un éxito comercial y el lanzamiento de Sylvester Stallone como una de las estrellas de Hollywood.

Precisamente, Sylvester Stallone protagonizó una de las películas referentes sobre el fútbol como fue 'Evasión o victoria', un drama épico ambientado en la II Guerra Mundial, en que un equipo de prisioneros aliados, todos jugadores, se deben enfrentar a una selección alemana.

La película de John Huston fue un éxito comercial pero muy alejada del fútbol, con pocos conocimientos del deporte del balón y con un Sylvester Stallone como heroico portero sin desmerecer para nada a Rocky o Rambo, a la hora de tratar de parar un penalti.

El boxeo con solo dos contrincantes es mucho más fácil de fotografiar que deportes colectivos como el fútbol con veintidós personas detrás del balón por eso, quizá las películas sobre el mayor espectáculo del mundo escasean si no se centran en grandes ídolos como los fueron Kubala, Di Stefano, Maradona o Pelé y más en la actualidad Messi o Cristiano Ronaldo.

Hollywood, como es costumbre, ha exportado sus deportes más populares a cualquier parte del mundo. Baloncesto, fútbol americano, béisbol o hockey sobre hielo han tenido títulos notables en la pantalla y el tenis, sin ir más lejos, tuvo su momento de gloria el año pasado con 'El método Williams', la dura infancia y adolescencia de las hermanas Serena y Venus Williams hasta convertirse en las estrellas que fueron. Por cierto, Will Smith emuló más bien al boxeo en la ceremonia de entrega del Oscar que consiguió como mejor actor.

Dicho esto, sí tengo un buen recuerdo de 'Invictus', la película de Clint Eastwood, que narraba la gesta del equipo sudafricano de rugby que, sin aparentemente grandes opciones, consiguió el campeonato del mundo durante el mandato del presidente Mandela y al mismo tiempo aquella gesta deportiva logró unir a un país olvidando el racismo que aún pervivía.

En esta línea está '42 segundos', la película de Dani de la Orden y Alex Murull que se estrenó este pasado fin de semana. Es un filme épico basado en la gesta del equipo olímpico de waterpolo español durante los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992. Un equipo deslavazado y con muy pocas posibilidades de ser competitivo cambió radicalmente su actitud de la mano de un entrenador croata Dragan Matutinovic, quién imponiendo un régimen, casi militar, consiguió que se fueran limando las diferencias.

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