No es un desafío menor

Como ejemplo gráfico, cada día se dan 4.200 millones de 'me gusta' en redes sociales como Instagram, TikTok o Twitch, donde, además, se suben 95 millones de fotos y 'stories' y se suman más de 800 millones de usuarios activos al mes. La mayoría de ellos son jóvenes, muchos menores de edad que tienen accesos a móviles, y que, sin saberlo, ponen en peligro su privacidad por conseguir mayor notoriedad.

Millennials y generaciones posteriores no advierten del riesgo que supone para ellos exponerse tanto públicamente.

Detrás de esa necesidad de aceptación, valoración o reconocimiento que buscan los jóvenes en las redes sociales, también se esconde su impulsividad en una etapa de su vida en la que están formando su pensamiento racional.

Pero no es el único problema que les atañe a los menores de edad. El manejo integral de la violencia contra los menores, los derechos de la infancia con discapacidad, la asistencia legal a las víctimas menores, el sistema de reforma juvenil, la violencia hacia menores en medios digitales o la constitucionalidad de la declaración de desamparo, son algunos de los problemas que están sobre la mesa, y que se abordarán entre hoy y mañana en Cádiz, durante las primeras Jornadas Nacionales de Menores y Adolescencia.

Más de un centenar de abogados y abogadas pertenecientes a los 83 Colegios de la Abogacía Española y otros Consejos Autonómicos de Colegios se encargarán de analizar estas temáticas en distintas mesas, organizadas por el Consejo General de la Abogacía Española y el Colegio de Abogados de Cádiz y se desarrollarán en el Hotel Cádiz Bahía.

Los expertos avisan de que la ley de protección digital del menor no va a la raíz del problema. El reto de conseguir mayor protección para adolescentes y niños es importante. En juego está su futuro individual y el del conjunto de la sociedad que estará al frente en unas décadas.