El carrusel de coros del lunes se podría celebrar por la tarde-noche al no ser festivo

El Carnaval de Cádiz afrontará en 2022 su año más extraño. Por motivos sanitarios, el Ayuntamiento ha decidido posponer la fecha habitual de febrero a junio . Pero debido al actual contexto, con la mínima incidencia del coronavirus y la vuelta a la normalidad, los aficionados disfrutarán de la fiesta en sus días habituales si la situación acompaña. Por tanto, se producirá el enfrentamiento entre el Carnaval oficioso de febrero-marzo y el oficial de mayo-junio.

Una batalla entre el equipo de Gobierno (con el apoyo de la cantera, los artesanos y los grupos punteros del Concurso) y el resto de gaditanos : oposición, coristas, hosteleros, aficionados, cofrades, medios de comunicación y un largo etcétera.

El último episodio se ha vivido este viernes 29 de octubre. El resto de grupos que conforman el Pleno municipal se han opuesto a la decisión de la delegación de Fiestas y han aprobado que el Carnaval se celebre en su fecha habitual (del 26 de febrero al 5 de marzo) y se han negado a cambiar el festivo del martes 1 de marzo.

Desde Ascoga (asociación de coristas) pidieron cambiar ese festivo al lunes 6 de junio porque se plantea un problema: ¿qué hacer con el carrusel del lunes de coros? El propio alcalde José María González 'Kichi' ha deslizado que posiblemente se tenga que celebrar por la tarde-noche , en sesión vespertina, debido a que no se trata de un día festivo.

Los dos domingos (Carnaval y Piñata) sería al mediodía, como marca la tradición, aunque el calor de esas fechas, a las puertas del verano, pueden obligar a abrir otro nuevo debate. Si es positivo que los intérpretes canten sus tangos en la batea a pleno sol si las temperaturas son muy elevadas. De hecho, los carruseles que se han llevado a cabo en temporada estival han sido al caer la tarde.