El Puerto
Valdelagrana, a pleno rendimiento y con serias carencias
Los meses de julio y agosto la urbanización triplica su población y los servicios básicos se quedan cortos
La urbanización portuense de Valdelagrana vive desde el pasado 1 de julio su temporada alta que, como la mayoría de entornos playeros, se extiende hasta el 31 de agosto. Este distrito de El Puerto llega a triplicar su población , pasando de los 8 o 9 mil residentes habituales a entre 25 y 30 mil sumando los veraneantes.
El turismo que acoge Valdelagrana es eminentemente nacional –sobre todo de Sevilla y Jerez – y familiar, y se basa en las segundas residencias. Es el caso de Reyes y Ubaldo , una pareja de jubilados de Calzada de Calatrava (Ciudad Real), que residieron un largo periodo en la capital hispalense y desde hace más de veinticinco años veranean aquí: «Primero con un piso de alquiler y luego nos compramos un apartamentito», comenta ella.
«Pasamos en El Puerto los dos meses estivales huyendo del calor manchego ahora y, antaño, del sevillano», afirma él, y añade que «aquí estamos en casa, siempre coincidimos los mismos en la playa y en el bar: vecinos que son ya amigos».
Es sábado dos de julio, y desde primera hora ya se ven pandillas de jóvenes jerezanos bajando por la Avenida hasta el paseo, desde el tren, dispuestos a echar «un buen diíta de playa y cachondeo», expone uno de ellos. También hay unos cuantos turistas que ya, a eso de las diez de la mañana, han plantado la sombrilla en el límite entre la arena seca y la mojada.
Se ven colas en las churrerías, deportistas matutinos y caminantes por el paseo marítimo, que evitan las horas en las que más aprieta el sol. Los contenedores llenos en torno a los bares y la casi ausencia de juventud atestiguan que la noche del viernes tuvo que ser larga e intensa.
Marcos , que es un pamplonica de 28 años, rompe el tópico del veraneante tipo de la urbanización. Cuenta que ha venido una semana con su madre, su tía y dos primas. Que los cinco suelen hacer una escapada a primeros de julio: «El año pasado tocó Chiclana y este año, El Puerto».
«Estamos en un apartamento turístico , y elegimos este destino porque queríamos hacer kayak en Los Toruños y no sé si se podrá también paddle surf...», declara entre dudas. «El lunes nos volvemos, que no queremos perdemos el chupinazo».
Cuenta otro veraneante, extremeño, que a él le gusta tanto «La Tacita» que le encanta bajar a esta playa porque siempre puede contemplar «La Alameda, el Carmen, La Pepa y la Bahía: cosa que desde el mismo Cádiz no se pueden ver a la vez», dice bromista, invirtiendo aquella anécdota del escritor Guy de Maupassant , un famoso detractor de la Torre Eiffel, que decía que le gustaba escribir desde la cafetería del «mamotreto de hierro» porque era el único punto de París desde donde no se veía.
Faltan policías, médicos y socorristas
Pero no todo es arena blanca lo que reluce en Valdelagrana. La Asociación de Vecinos de la urbanización expone las carencias y deficiencias de la misma, por boca de su presidenta, Pepa Barrero.
Para empezar, comenta, « no hay policía de playa porque el Ayuntamiento dice que no hay recursos para ello», « sólo tenemos dos socorristas para una playa de dos kilómetros» y, además, « únicamente contamos con un par de médicos y ningún pediatra para una población que triplica su número de habitantes».
Esta última petición, la de aumentar la dotación en el único centro de salud, confirma que la han « elevado al SAS y al Consejo Provincial de Participación Ciudadana , sin haber obtenido ninguna respuesta».
La asociación, asegura su presidenta, ha pedido al consistorio portuense « un plan especial de verano para Valdelagrana, como los que se hacen para la motorada o la feria, para que haya un dispositivo exclusivo durante los dos meses fuertes».
Además, desde la AAVV de Valdegrana hacen especial hincapié en tres asuntos a priori menores pero de relevancia para sus vecinos: «La reforma de la U del skatepark , la no obstrucción y protección del carril bici al colegio/instituto y la instalación de postes de voley-playa ».
Están satisfechos con el servicio de limpieza de playa y mantienen una comunicación fluida con ciertos concejales, «pero muchas veces hay que estar detrás de ellos para asuntos de su competencia que tenían que prever», concluye la portavoz de los vecinos de Valdelagrana.
