Un protocolo contra tsunamis que no existe y un Real Decreto en marcha

El Doctor en Ingeniería de Caminos, Canales y Puerto, Gregorio Gómez Pina, ha participado en las reuniones que han puesto en marcha la elaboración de un Real Decreto sobre el protocolo a seguir en caso de que se produzca un tsunami en España.

La ley, que tendrá que ser todavía aprobada discutida por las diferentes administraciones -nacional, regional y local- establecerá las bases que ayuden a coordinar una catástrofe natural como un maremoto o tsunami. «Se ha dado un paso de gigante», afirma Gómez Pina. «Era totalmente necesario. Si viniera ahora mismo un maremoto, ¿usted sabría dónde ir? Yo no».

«Hace dos años ni siquiera se sabía quién tenía que dar el aviso de maremoto. Ahora, al menos, ya sabemos que se encarga el Instituto Geográfico Nacional», añade José Antonio Aparicio, presidente del Instituto Español para la Reducción de los Desastres (IERD).

Tampoco existen medios técnicos, advierte. Las bollas oceanográficas actuales no distinguen entre vendaval y tsunami ya que están en la superficie del mar. Además, los mareógrafos están en la costa, en un cantil del puerto, por lo que «cuando alerten ya tendremos el maremoto encima».

Al margen de la necesidad de medios técnicos y de la responsabilidad de los organismos públicos, para Gregorio Gómez Pina también es «fundamental», la educación ciudadana. «Habría que educar de este tema sin alarmismo. En los colegios, como una cosa que puede pasar. Es importantísimo que esa información se traslade al ciudadano. En caso contrario, la prevención, no servirá de nada».