La OMS alerta del riesgo de propagación internacional de la fiebre amarilla

Los viajes y los cambios en los modos de vida podrían provocar una propagación del actual brote de fiebre amarilla, detectado por primera vez en diciembre de 2015 en Luanda (Angola), a nivel internacional, según declaró hoy en Ginebra el director general adjunto de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Bruce Alyward.

Aylward, un médico especializado en enfermedades infecciosas, afirmó que el actual brote epidémico podría transformarse en una amenaza sanitaria internacional si no se toman las medidas de precaución necesarias y se vacuna a la población más expuesta debido a que los viajes y su presencia en ciudades densamente pobladas favorizan su expansión.

La fiebre amarilla es una enfermedad vírica hemorrágica, transmitida por mosquitos de tipo Aedes aegypti, vector de numerosos virus como el Zika o la dengue, que puede ser muy peligrosa en zona urbana.

En mayo pasado la OMS recomendó que todos los viajeros que acuden a Angola o la República Democrática del Congo fuesen vacunados.

Durante un conferencia de prensa, Ayward advirtió que si la epidemia ha estado bajo control desde 2006 esta situación podría cambiar en el futuro debido a que la situación, en África, no es la misma diez años después debido a la elevada tasa de natalidad en este continente y a los movimientos de población que existen entre los 33 países donde el virus está presente.

"Por este motivo la OMS está revisando su estrategia frente a esta peligrosa enfermedad que provoca elevedos porcentajes de mortalidad entre sus víctimas", explicó el especialista. De acuerdo con Aylward, el virus está presente en unos 47 países de África y de Sudamérica en los que viven unos 900 millones de personas.

"El peligro es que ocurran brotes explosivos que podrían desestabilizar la situación actual ya que cuando los virus proliferan en las ciudades el riesgo de contagio internacional es elevado", explicó Aylward precisando que el pasado mes de mayo fueron detectados varios casos en China en trabajadores que regresaban de Angola.

De acuerdo con el último recuento de la OMS, el pasado 6 de Julio habían unos 3.500 casos sospechosos y 860 confirmados, en laboratorio, en Angola. El número de muertos a causa de esta enfermedad se elevaba a 355. Por otro lado, unos 1.300 casos sospechosos han sido registrados en la República Democrática del Congo (RDC), 68 confirmados y 75 víctimas mortales.

Las inquietudes de la OMS se deben también a que hasta la fecha tres países han declarado casos de importación del virus que provoca la fiebre amarilla desde Angola. China con 11 casos confirmados , la República Democrática del Congo con 59 y Kenya que ha declarado dos casos de contagio.