Jóvenes y noveles, en el punto de mira

La entrada del carné por puntos el próximo sábado supone un reto para el conjunto de la sociedad española, ya que con este nuevo sistema, las infracciones pueden ser castigadas con la retirada del carné de conducir si se pierden todos los puntos. Un colectivo especialmente «hostigado» por esta nueva medida van a ser los jóvenes, pues cualquier imprudencia o desmán, como no llevar casco o el exceso de velocidad, les puede restar varios puntos hasta dejarlos bajo mínimos.

De esta manera, Manuel Hidalgo, transportista y gran conocedor del mundo de la carretera lo tiene muy claro. «Por muchos puntos que te quiten con el carné por puntos, la gente va a seguir conduciendo igual de mal que antes. La única manera para que la gente escarmiente son las multas. Cuando la gente tenga que pagar 300 ó 400 euros por una infracción es cuando comenzará a circular de una forma civilizada», resume Hidalgo.

El nuevo sistema de puntos no conlleva la desaparición de la sanción económica, sino que se suma a ella. «No creo que el carné por puntos vaya a perjudicar a la gente mayor. Yo tengo carné desde hace más de 30 años y la última multa me la pusieron en los 90. Los principales perjudicados van a ser los jóvenes, que son los que comenten la mayoría de tropelías en la carretera».

Curiosamente, los jóvenes están totalmente de acuerdo con esta afirmación. Van a ser los principales afectados por este novedoso experimento aunque también piensan que la única solución para evitar la perdida de puntos es la prudencia.

Óscar Ramírez se sacó el carné el año pasado y tiene bien claro que a partir del próximo sábado las cosas van a cambiar de un modo radical. Este joven relata que le costó mucho dinero y tiempo sacarse el carné. «Tardé seis meses en aprobar el examen práctico y el teórico, y eso por no hablar del dinero que me gasté, que me salió por un ojo de la cara», comenta y añade que no está dispuesto a perder su apreciado carné «por hacer el loco».

Sin embargo, hay opiniones totalmente distintas. Miguel Ybarra es un joven que se muestra escéptico con respecto a la nueva medida. Ybarra piensa que «ahora mismo, si cometes una infracción te ponen una multa de 100 a 1.000 euros, dependiendo del tipo de falta que cometas. Pues bien, aquí todo el mundo hace lo que le da la gana. No creo que los conductores vayan a cambiar su comportamiento de un día para otro por este nuevo sistema».