Opinión

La IA, los chatbot y el GPT3

Siempre intento mantenerme al día de las nuevas tecnologías, pero a veces van demasiado deprisa y dichas tecnologías me parecen salidas de las obras de ciencia ficción

Patricia Gallardo

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Como siempre intento mantenerme al día de las nuevas tecnologías, pero a veces van demasiado deprisa y dichas tecnologías me parecen salidas de las obras de ciencia ficción. Algo que me fascina y a la vez me da pánico es la Inteligencia Artificial, conocida por sus siglas IA. La inteligencia artificial dentro del contexto de la computación, es una combinación de algoritmos en un entorno computacional dinámico que imitan los procesos de la inteligencia humana, o dicho de manera más sencilla, intentar que los ordenadores piensen y reaccionen como humanos. Según Wikipedia: «No tiene como finalidad reemplazar a los humanos, sino mejorar significativamente las capacidades y contribuciones humanas», lo cual es bueno, si lo aplicamos en contextos didácticos, por ejemplo, usándola en herramientas que nos ayuden a asimilar los conocimientos o facilitar la enseñanza on line, para que el mundo no se pare, incluso en pandemia. O para la mejora de la salud, en el diagnóstico temprano o las intervenciones más precisas. También es muy útil para el desarrollo y buen funcionamiento de las empresas, como es el caso de los chatbots que han resultado de gran utilidad para las pymes. Seguramente la mayoría de las personas han usado un chatbot, yo he sido una de ellas, aunque hasta hace tres días no sabía que se llamaban así. Para el que esté como yo, medio en la inopia, un chabot o asistente virtual es un software que simula una conversación real con una persona. Es un chat que nos da respuestas automatizadas a preguntas frecuentes, de ahí que sea tan útil en la atención al cliente de las pymes, ya que no se necesita grandes equipos, ni mucho personal para mantenerlos. La mayoría de los chabots tienen unas características comunes: siempre están disponibles sin límites de horarios, deben tener opciones de contacto con el servicio al cliente «real» y usan un lenguaje natural y sencillo. Y esto último me lleva al GPT3, algo que hasta hace poco no conocía y de lo que me habló un amigo, así que tuve un tema nuevo que «investigar».

El GPT3 es un nuevo modelo de inteligencia artificial que permite generar lenguaje escrito, por lo visto el usuario solo tiene que comenzar a escribir un párrafo y el propio sistema se encarga de completar el resto de la forma más coherente posible. Hasta ahora IA se ha aplicado a cosas muy concretas, pero los científicos e ingenieros quieren dar un paso más que es conseguir una Inteligencia Artificial General (AGI por sus siglas en inglés), una IA capaz de aprender como los humanos y el GPT3 empieza a ser un ejemplo de ello.

La verdad que la aplicación me dio curiosidad, y animada por mi amigo, intenté usarla, digo intenté porque no me quedaron muy claras las instrucciones de uso, así que veré algún tutorial de YouTube otro día, pero la verdad que lo poco que vi me impactó y mucho más cuando el programa me preguntó el uso que le daría, si personal, periodista y creador de contenido, etc. O lo que es lo mismo, si hubiera sabido usarlo, tal vez esta columna hubiera estado escrita por IA, que es lo que me da pánico, porque aunque como dice la Wiki la IA no quiere sustituir a los humanos, yo no me fiaría. Y para que veáis que este artículo no es de un robot, a modo de Captcha os dejo algunas palabras que la IA no conoce fijo: Guachisnái, bastinazo, gargajillo, manolete, contraflecha, casapuerta, calicha pelotazo, zarcillo y limeta.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación