OPINIÓN
El Olivillo se reinventa
La reapertura de este emblemático edificio permite avanzar en el cinturón universitario de Cádiz
En mayo de 2017 la Universidad de Cádiz dio otro paso al frente en su estrategia por coser un cinturón universitario desde el entorno de La Caleta has Santa Bárbara y la Alameda. Ese año licitó la contratación para la obra de rehabilitación del histórico ... edificio de El Olivillo para convertirlo en centro de transferencia empresarial por un presupuesto de 6,2 millones de euros y un plazo de ejecución de 16 meses. El inmueble se acaba de reinaugurar después de 30 años sin vida. La rehabilitación del Olivillo ha permitido transformar un edificio abandonado en el casco antiguo de Cádiz, junto a la playa de la Caleta, en un centro de transferencia empresarial. Allí se ha ubicado la oficina de proyectos europeos, de prácticas de empresas, de transferencia de resultados de investigación y se gestionarán proyectos de innovación y asesoramiento tecnológico, simuladores de productos y procesos industriales, pruebas de robótica e incluso ensayos de energías renovables marinas, entre otras utilidades. El Olivillo fue proyectado en 1937 por el arquitecto Antonio Sánchez Esteve e inscrito en el catálogo de patrimonio histórico andaluz con nivel de protección tres, ocupa una parcela de 1.551 metros cuadrados, con 4.150 metros cuadrados útiles distribuidos en sótano, cinco plantas y ático. La reapertura del Olivillo y del colegio mayor Beato Diego vuelven a dar vida al entorno del Parque Genovés. Este histórico emplazamiento fue durante 40 años el Instituto de Higiene, primero, y posteriormente el Instituto Provincial de Sanidad.Ahora, con su nueva vida por delante, se convierte en el Centro de Transferencia Empresarial, donde por primera vez se unirán en un mismo espacio las empresas y la universidad, con el objetivo de dar impulso a sectores industriales y empresariales desde la innovación, así como el apoyo a los emprendedores. La obra se ha realizado en un tiempo récord, pues tan solo han pasado 18 meses desde que se pusiera la primera piedra de este nuevo equipamiento por parte de la empresa Sando. El edificio ha mantenido parte de su estructura y, a pesar de sus dificultades, se ha podido mantener la original fachada que caracteriza a esta emblemática construcción que data de 1941. Esta obra demuestra el compromiso de la universidad de Cádiz no solo con el conocimiento sino también con la conservación y el mantenimiento de los edificios.
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