«Una Conviá»

Es una película que habla de la juventud y la alegría en esos años en que no hay un mañana . Comienza y termina con una fiesta. Una carrera con la cerveza como aliciente y la graduación de los chicos. Entre medias la historia de cuatro amigos, cuatro profesores que se reúnen para celebra los cuarenta años de uno de ellos. Tras una cena relajada y de la que salen algo bebidos, deciden poner en práctica la teoría del psiquiatra noruego Finn Skârderund , según el cual todos nacemos con un déficit de alcohol en sangre del 0’5%, la cantidad máxima permitida para conducir. A partir de esa noche y todos los días, menos los fines de semana, beberán hasta alcanzar ese límite, corroborándolo con un alcoholímetro.

Los resultados son más que positivos . De ser profesores cuestionados y aburridos , se convierten en docentes que hacen amenas y brillantes sus clases, en especial en el caso del personaje que interpreta Mads Mikkelsen(“La caza”) que supera la depresión que le estaba hundiendo y hace que las cosas mejoren también con su familia.

La experiencia resulta tan buena que deciden apretar las tuercas, es decir, subir la dosis de alcohol . Ahí ya entramos en otro estado más complejo y la reacción de los cuatro amigos va a tomar derroteros diferentes.

“En otra ronda “ se pasa de la comedia al drama casi en un soplo, pero sobre todo se respira vida y esa complicidad que bebe del pensamiento de Kierdegard, que vemos en pantalla al inicio de la película : “¿Qué es la juventud? Un sueño. ¿Qué es el amor? El contenido del sueño”.

La película no defiende la ingesta de alcohol como algunos apuntan, pero tampoco lo demoniza y describe, al mismo tiempo, lo pernicioso de los excesos . Vinterberg cuando preparaba la película sufrió la pérdida de una hija de 19 años en accidente de tráfico. Con ella había estado preparando algunos detalles sobre las inquietudes de los jóvenes para incorporarlas a su guion. Para el director, aquel trágico suceso le convenció de que debía rodar una celebración de la vida. Esa celebración es “Otra ronda”, en la que todos los protagonistas se introducen y nos introducen en una borrachera cinematográfica que no deja ningún tipo de resaca