Del bufé y de la información

Gran parte del electorado acude a la información como quien va a un bufé, en el que se indigesta con los postres de las noticias del corazón o se atiborra con la fritura de lo anecdótico

Andrés G. Latorre

Esta funcionalidad es sólo para registrados

A la hora de hacer comparaciones, metáforas, símiles y demás trampas de las palabras, uno puede llegar a la precisión o a la mentira según sea el relleno de su propia cabeza. Y yo, en la mía, como un Obélix sin gala, no tengo más ... que comida (y algún pájaro). Es por eso que, a la hora de hablar de cómo se informan nuestros conciudadanos, no me viene otra imagen que la del bufé libre. No importa que sea de gran hotel o de comedor de presidio (si es que esas cosas se estilan en esos lares), uno va tomando platos a voluntad y quejándose más de los que no coge que de los que elige.

Artículo para resgitrado

Lee ahora mismo todos los contenidos de ABC

Mensual Sin precio, gratuito Pruébalo
Anual Sin precio, gratuito Suscríbete
Comparte esta noticia por correo electrónico
Reporta un error en esta noticia