El Apunte
Soluciones reales contra la violencia machista
Los casos de violencia de género continúan creciendo mientras el Gobierno ha convertido este problema traumático en arma arrojadiza
La violencia machista es una lacra vigente en nuestra sociedad. Encontrar la fórmula para cortar por lo sano con esta sangría es el objetivo de todos. Se trata de un problema estructural que atañe al modo en que algunos hombres conciben su relación con las mujeres. Los datos demuestran que el número de casos ha ido creciendo en nuestra sociedad. Sin ir más lejos, en este 2023 se acumulan cinco casos en la provincia de Cádiz. Esta cifra supone un incuestionable escándalo para cualquier sociedad moralmente aceptable, algo que, por otro lado, deja en evidencia las políticas estériles llevadas a cabo por el Gobierno para atajar la situación.
La ministra de Igualdad en funciones, Irene Montero, ha convertido una cuestión tan central y traumática en un arma arrojadiza políticamente, generando un fanatismo legislativo y discursivo que es contraproducente. Mucho ruido pero pocas soluciones para un problema muy serio.
Tampoco se puede dejar de lado que pese al significativo aumento presupuestario del Ministerio de Igualdad, la situación no solo no ha mejorado, sino que por desgracia, ha empeorado. Este año, las partidas destinadas al Ministerio alcanzaron los 573 millones, un nuevo récord para el departamento. Casi la mitad iba debía ir destinado a políticas para prevenir las violencias machistas.
Sin embargo, el Gobierno parece empeñado en buscar enfrentamientos en vez de encontrar soluciones a esta lacra. Es incapaz de frenar la sangría machista, y ahora, por ejemplo, señala al negacionismo como el responsable de que se diluyan los mensajes contra la lacra.
La Ley del 'Sí es sí' ha sido un despropósito desde su puesta en marcha para las mujeres agredidas por sus parejas.
Año a año crecen las denuncias por violencia de género en la provincia de Cádiz. La memoria anual del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) refleja que en el año 2022 se recibieron un total de 5.777 denuncias, lo que hace una media de 15,82 denuncias diarias.
Es hora de encontrar soluciones reales para acabar con esta lacra.
