Desatinos de verano

El Rey tiene que llamar a consulta a los representantes designados por los grupos políticos con representación parlamentaria en el Congreso cuando es de prever que varios de ellos ni piensen en pisar La Zarzuela

Enrique García-Agulló

Esta funcionalidad es sólo para registrados

La verdad es que de lo que quería escribir hoy era del trascendental dilema que se le va a presentar al Rey con lo que establece el artículo 99 de nuestra Constitución y lo que presuntamente pueden plantearle los posibles candidatos a la presidencia del gobierno, tanto el que ha ganado las elecciones, como el que dice que las ha ganado en eso que llama representación social, que ya es torcer el rizo en tan largo y proceloso viaje en que ha ido degradándose la representación nacional, a la popular y, ahora, a la social.

El Rey tiene que llamar a consulta a los representantes designados por los grupos políticos con representación parlamentaria en el Congreso cuando es de prever que varios de ellos ni piensen en pisar La Zarzuela. Uno, el candidato con más votos obtenidos, podrá adelantarle para su conocimiento la voluntad de las otras formaciones políticas que le ayudarían a conseguir esa situación y que, después, llamadas a consulta, se lo corroborarían, pero, el otro, el que las ha perdido, artista en eso de los 'cambios de opinión', no sé cómo va a acreditar sus apoyos ya que, a buena parte de esos socios, el Rey puede que ni tenga ocasión de escucharles porque sencillamente no quieren ir a verle, como si les diera repelús. En fin, puede que vaya con un papel como el que se va a la junta de propietarios del bloque diciendo que, además de su voto, lleva los de mengano, fulano o zutano. Y hablando de desatinos/destinos, nos hemos encontrado con el vacacional de Sánchez, tan peculiar y por el que es la primera vez que Moncloa informa a los españoles que se lo ha pagado de su bolsillo y que ha viajado en avión de línea regular abonando también su billete y el de sus acompañantes. Vale, pero ya lo decía el aforismo latino, 'excusa no pedida, acusación manifiesta', así que a ver si los mismos informantes nos cuentan cómo se pagaron las anteriores vacaciones y los anteriores desplazamientos.

En estos desmanes de esta España verdaderamente invertebrada, en otras de sus ocurrencias, le ha dado ahora a la líder de Sumar por sacar a la palestra lo de la cooficialidad en el Congreso de la Nación de las lenguas autonómicas, rizo rizado de penúltima generación y operación pre-blanqueo del prófugo de Waterloo. Nuestra Constitución dice que el castellano es la lengua oficial del Estado y que las demás lenguas españolas serán también oficiales, pero… en las respectivas Comunidades Autónomas, de acuerdo con sus Estatutos. Y hasta ahí llegó la marea.

Lo que no nos dice nuestra Constitución es que se hagan cooficiales fuera de sus territorios traspasando sus límites autonómicos e invadiendo los territorios comunes. La misma Ley Magna tiene igualmente establecido que las Cortes Generales, Congreso y Senado, representan a todo el pueblo español, vivamos donde vivamos y, aún más, que la capital del Estado es la villa de Madrid donde, por si fuera poco, y hasta la presente, la única lengua oficial es también la castellana.

Que un personaje de éstos que ha conseguido acta de diputado o de senador ahora nos hable o, mejor, nos lea a los españoles a través de un intérprete de lenguas lo que otros le escriben, me parece, además de otro gasto público innecesario con nuestro dinero privado en sus manos, otro disparate de quienes no saben hacer otra cosa o no quieren hacerla y que cada día se sacan algo de la chistera por no apearse del machito. Ni yo, ni ningún elector español más, vivamos donde vivamos, hemos votado a esos intérpretes para que nos traduzcan la voz de nuestra representación nacional. A ver si ahora vamos a tener que encontrarnos con que también se pide para los intérpretes inmunidad parlamentaria ya que, a la postre, lo que esta señora propone es que sean ellos quienes tengan la última palabra.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación