EL APUNTE
Marlaska se equivoca
El ministro de Interior resta importancia al nuevo altercado en el cuartel de Barbate
La desfachatez del ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska, no tiene límites. De nuevo se equivoca con sus declaraciones y actos. El ministro ha restado importancia al altercado ocurrido el martes por la tarde en el cuartel de la Guardia Civil cuando un grupo de ... jóvenes amenazó y insultó a los agentes tras practicar una detención por imprudencia en la circulación. Marlaska consideró ayer que lo ocurrido en Barbate era un «incidente callejero» y reconoció que la situación social puede estar influenciada por el asesinato de dos guardias civiles el pasado 9 de febrero a manos de unos narcos. El ministro parece que no es consciente de lo que dice ni tampoco de la repercusión que pueden tener sus palabras en una zona de tanta conflictividad como el Campo de Gibraltar. En su opinión, lo ocurrido en Barbate este martes ocurre también en otros lugares de España sin que tengan «mayor repercusión y relevancia». La Guardia Civil ha desplegado un operativo con un centenar de agentes y ha detenido a dos de las personas que este martes se dirigieron al cuartel de Barbate para increpar a los agentes después de que una patrulla diera el alto a varios de ellos cuando circulaban a gran velocidad por el casco urbano de Vejer de la Frontera. El ministro ha insistido en que se trató de un «incidente callejero» y no de un «asalto» al cuartel, como denunció en un primer momento la Asociación Unificada de Guardias Civiles, si bien ha admitido que el asesinato de dos agentes arrollados por una narcolancha puede haber influido en la repercusión del caso. Marlaska ha sido reprobado en el Congreso y Senado ante la falta de medios de la Guardia Civil en la lucha contra el narcotráfico, lo que ha dado lugar al luctuoso suceso en el muelle de Barbate que acabó con la vida de dos agentes cuando trataban de disuadir una narcolancha. Los delincuentes embistieron contra la zodiac de la Benemérita provocando que los agentes cayeran al agua y los narcos pasaran su embarcación por encima de ellos provocándoles la muerte. Marlaska, pese a la gravedad del suceso, se ha negado a dimitir y ha destacado que la lucha contra el tráfico de drogas sigue más activa que nunca y con más medios. Dos de los implicados en los hechos anteriores; dos hermanos, junto con otro hermano y otra hermana, fueron los que comenzaron a increpar a los agentes en el cuartel. Marlaska no entiende que situaciones como la vivida en Barbate el martes son fruto de la pérdida de autoridad de las Fuerza y Cuerpos de Seguridad del Estado.
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