Un hombre llamado «Norberta»

«Norberta», la película que dirigen las debutantes Sonia Escolano y Belén López Albert es fresca, divertida y profundamente humana porque trata con sensibilidad e inteligencia un tema delicado como es la transexualidad.

Norberto es un hombre que siempre se ha considerado una mujer, pero que nunca se ha atrevido a confesarlo. Con guión de Sonia Escolano «Norberta», se sustenta en un sólido reparto que encabezan, en estado de gracia, Luis Bermejo y Adriana Ozores que interpretan un matrimonio otoñal que, vive modestamente y mejora su precaria economía con pequeños atracos. Llevan siendo pareja, casi desde su niñez y su vida se centra en el grupo de amigos del barrio y su hija y nieta adolescente. Un grupo de personajes divertidos, abiertos y solidarios que ponen una sonrisa a la vida, a pesar de las dificultades por las que atraviesan.

A Norberto le gusta vestirse de mujer en los atracos . Se arregla minuciosamente para llevar adelante los robos y busca cualquier ocasión para ponerse un vestido. Siempre quiso ser una mujer, pero no se atreve a contarle su realidad a María(Adriana Ozores) a la que quiere por encima de todo. Tiene que atreverse a dar el paso y contarle a su familia y amigos que siempre se ha sentido mujer y que quiere convertirse en Norberta.

«Norberta» en su conjunto es una historia de gran profundidad y ternura tratada con humor porque, seguramente, es una manera más directa de contar las verdades y conectar con los espectadores. El tema de la transexualidad se trata con un respeto absoluto. Como dato añadido, la película está basada en la historia real de una persona mayor que, en los ya lejanos años ochenta, decidió cambiar de sexo. Era una persona de raza gitana que, encontró el apoyo de quienes le rodeaban.

La cinta nos lleva a la conclusión de que no sentirse solo y encontrar el respaldo de los más próximos es la mejor manera de afrontar situaciones como la que plantea «Norberta» que nos hará reír, pero, sobre todo, pensar.