«No era una avalancha, solo había mucha gente, una encima de otra»

Un despropósito lleno de contradicciones, olvidos y de ironía de la mala. Así fue la sesión que se celebró ayer por el juicio del Madrid Arena en la Audiencia Provincial de Madrid. Para muestra, un botón. «¿A quién quería usted que avisara?», espetó Manuel Montalvo Ruiz, coordinador de Kontrol 34, a una de las partes, en alusión a la avalancha que se originó en el vomitorio, después de llevar a dos de las víctimas a la enfermería tras disolverse el tapón humano con el público del «garito» por el anillo interior.

Aseguró que la noche de la tragedia no trabajó porque acababa de llegar de Inglaterra. No recuerda nada porque «ha pasado mucho tiempo, pero sabe que fue a dar una vuelta».

Montalvo, conocido como «Lolo», que declaró como testigo, era de la empresa de Carlos Manzanares (Kontrol 34) y se encargaba de facilitar a Diviertt, la firma del promotor, Miguel Ángel Flores, controladores de acceso (porteros) y auxiliares. «Yo organizaba a los chicos», dijo. «Cree» que esa noche le sustituyó Juan Francisco Cuerdo Manzano, apodado «Paco» y «Tito».

Este, sin embargo, indicó que le contrató Diviertt. Tampoco llamó por teléfono a nadie al ver el tapón, salió a pedir ayuda a Seguriber y Diviertt al ver el mogollón. «Yo no lo llamaría avalancha: solo había mucha gente, una encima de la otra». Él fue la única persona de las cinco que declararon, porteros incluidos, que conocía el plan de seguridad.

«Cuando salían del vomitorio se venían arriba»

«Lolo», aunque lo negó, habló por teléfono al poco de llegar al Arena en dos ocasiones con Gema Aznal, encargada de realizar los contratos de Diviertt, por espacio de 30 y 27 minutos y, además, mantuvo otra conversación de 15 minutos con Francisco del Amo, jefe de Operaciones de Madridec, la empresa que gestionaba el espacio municipal. Así se lo demostró el letrado de una de las partes, echando mano del listado de llamadas del sumario. «¿Por qué lo hizo si no trabajó esa noche?», le interpeló. «No lo sé. Si lo dice Movistar, que es sabio será así. lo haría para entrar», ironizó. «No tanto tiempo...», le replicó el abogado.

Después, «Lolo» indicó que escuchó a Cuerdo decir que había «un problema» abajo. «Fuimos hacía allí. Era en un vomitorio. Mi primer instinto fue intentar tirar de los chicos, había muchos, desmayados en el suelo, pero era imposible sacarlos, pero cuando salían, se venían arriba». Una abogada le preguntó:«¿Había mucha gente antes de la montonera?». «Lolo» replicó: «Depende de quién lo mire». «¿Y cuándo actuó Aoki?», volvió a la carga la letrada. «¿Ese quién es?», contestó.

Uno de los dos porteros búlgaros que declaró, (el tercero está en busca y captura), se contradijo. «Me encontré con la avalancha cuando entré en el pabellón para ir al baño, no lo consideré un incidente. No me pareció serio. Había niños en el suelo, pero duró poco: 3, 5 o 20 minutos» dijo Ventsislav Bozhilov. Antes, a una acusación particular le precisó que «había personas en el suelo, pero estaba casi despejado». Explicaron que trabajaron como auxiliares (organizar las filas), no de controladores ni de la vigilancia interior, como sostiene la Policía.