La nueva medida del gobierno italiano fue promovida con entusiasmo por el exprimer ministro Matteo Renzi
La nueva medida del gobierno italiano fue promovida con entusiasmo por el exprimer ministro Matteo Renzi - EFE

Italia pretende convertirse en paraíso para ricos

El Fisco se limitará a imponer un impuesto fijo de 100.000 euros al año para los multimillonarios que fijen su residencia en este país

CORRESPONSAL EN ROMA Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

“Bienvenidos a Italia”. El gobierno italiano acaba de poner en práctica una ley para convencer a los extranjeros ricos a establecer su residencia en este país, pagando un impuesto único anual de 100.000 euros. Si los multimillonarios tienen mujer o hijos con rentas separadas, éstos podrán gozar de las mismas ventajas fiscales, pagando 25.000 euros. Este tratamiento fiscal se les garantiza durante 15 años.

La estrategia ha sido estudiada para este momento especial, aprovechando cierto nerviosismo que reina en Londres, a causa del Brexit, entre algunos ricos - jeques del petróleo, oligarcas rusos, nuevos ricos de Asia, etc.- con residencia en Gran Bretaña. Además de Inglaterra, otros países han intentado atraer capitales con ventajes fiscales, entre ellos España y Portugal, pero la oferta italiana es especialmente generosa, porque el objetivo es que, además de las personas, lleguen también a Italia sus actividades económicas.

¿Tendrá Italia la capacidad de ser un imán para atraer la riqueza de los millonarios? “Un estudio de Hong Kong subraya que hay millones de nuevos ricos en Asia, en América del Sur, Rusia y Europa del Este que desearían transferir sus familias a Occidente, porque la calidad de la vida en sus países no alcanzará los niveles occidentales hasta dentro de 30 años. Italia es el tercer país europeo como meta ideal”, afirma Giancarlo Bracco, fundador de una inmobiliaria de casas de lujo en Cerdeña, que durante años ha hecho campaña a favor de una ley como la que ahora se pone en práctica.

Italia, paraíso de ricos

Italia tiene ya una cierta tradición de ricos ingleses o americanos enamorados de algunas zonas del “Bel paese”, clásica expresión poética para indicar Italia. Los hay enamorados de la Toscana, como, por ejemplo, el cantante Sting, con un patrimonio de 210 millones, que tiene villa en la zona del Chianti; el actor George Clooney, con 240 millones de patrimonio, posee una espléndida residencia a orillas del lago de cómo; otro actor más “pobre”, como Willem Dafoe”, con 25 millones de euros, prefiere Roma; algunos ricachones rusos frecuentan desde hace años la Costa Esmeralda en Cerdeña: Alisher Usmanov, industrial, o el empresario Tariko Roustam. La isla sarda es preferida igualmente por multimillonarios árabes, como el emir de Tamin al-Thani. Otras zonas atractivas de Italia para los ricos son la Costa Amalfitana: el escritor Gore Vidal vivió durante decenios en una magnífica mansión en Ravello.

Decisión polemica

La nueva medida del gobierno italiano, que promovió con entusiasmo el exprimer ministro Matteo Renzi, no está exenta de críticas. Especialmente duro ha sido el exministro de Finanzas Vincenzo Fisco, de centro izquierda: “Competir con los ingleses tras el Brexit, intentando a cualquier coste la llegada de ricos, solo sirve a crear un mundo de desigualdades, alimentando el populismo”. Pero otros la consideran positiva, por estimar que si los ricos transfieren también sus capitales e inversiones a Italia pueden contribuir a crear puestos de trabajo. En definitiva, Italia se divide entre quienes ponen reservas al “welcome to Italy” y quienes evocando una cita bíblica afirman: “Dejad que los ricos vengan a mi”.

Ver los comentarios