El alma de acero del torero que superó un cáncer testicular

El torero Javier Castaño ha asegurado en Logroño que se aferró al objetivo de «vérselas de nuevo con los miuras» en Sevilla para tener fuerzas y continuar con el duro tratamiento que le ha permitido superar un cáncer testicular.

Castaño (León, 1980) ha participado recientemente en el XL Ciclo de Conferencias del Club Taurino Logroñés, en el que ha reconocido que, desde que se le diagnosticó la enfermedad el pasado mes de enero, tiene la sensación de «ver las cosas de diferente manera».

En declaraciones a Efe, ha subrayado que en su vida hay «un antes y un después» y «si algo me ha enseñado la enfermedad es a darle importancia a cosas a las que antes no se las daba».

«No solo vivo de un modo más intenso las corridas de toros, es que, además, cada momento, cada instante, es ahora mucho más especial», según el torero, porque «cuando pasas por trances tan duros como un tratamiento de quimioterapia, te das cuenta de que ha habido momentos anteriores en mi vida que no los he sabido disfrutar».

"Cuando hace ahora un año preparaba la que ha sido mi decimoquinta temporada, todo lo encaminaba hacia algo especial con un buen número de festejos en plazas importantes", ha dicho.

Sin embargo, «ahora, mirando todo lo que he pasado y tras haber hecho solo nueve paseíllos, tengo que decir que me siento feliz y satisfecho», ha afirmado Castaño, quien ingresó en la Escuela Taurina de Salamanca en 1995.

El torero estuvo en Logroño acompañado por el periodista Javier Lorenzo, autor del libro «Castaño, alma de acero», y por responsables de la Asociación Española de Lucha Contra el Cáncer en La Rioja, de la que ponderó la labor que desarrolla esta entidad.

«Hasta que uno no pasa por situaciones así no se da uno cuenta de la labor que hace esta Asociación, es de elogiar, es un trabajo inmenso que jamás les podremos agradecer», ha puntualizado.

Ha indicado que es consciente que hay muchas personas que sufren esta enfermedad y «ojalá pueden ver en mi caso un estímulo como una salida para no rendirse y luchar».

«Si lo que he padecido es visto como un ejemplo de superación, doy por bien empleado mi sufrimiento», ha afirmado Castaño, quien, ante su próxima temporada, ha reconocido que despertará cierto «cariño» entre el público.

Pero su objetivo está en lograr ser «juzgado» como cualquier otro torero, por lo que su propósito está en que salga una temporada importante a base de «ganarse» los contratos en el ruedo.