Un «Macbeth» africano y polémico para sacudir el festival Temporada Alta

«Macbeth es un personaje universal y, por lo tanto, el público europeo puede entender lo que explica tanto si está en Marte como en Júpiter o en la Luna». La frase, aparentemente inocente, la sucribiría cualquier dramaturgo y director de escena, pero en boca de Brett Bailey cobra un significado especial. Tanto es así que el sudafricano, enfant terrible de la escena teatral de su país, ha agarrado la célebre ópera verdiana para trasladarla al Congo. En concreto, «a una una zona de conflicto al este del país donde 5,5 millones de personas han sido asesinadas en los últimos veinte años», en palabras del propio Bailey.

Así, convertido en el azote del convencionalismo, Baily llega al Festival Temporada Alta de Gerona para exhibir en el Teatro Municipal su particular versión de un Macbeth en la que el noble escocés se convierte un señor de la guerra africano.

Su Lady lo apoya más loca que nunca, llena de ambición.

¿El objetivo? Denunciar los intereses financieros ocultos tras los conflictos que asolan aquel continente. «Muy poca gente en el mundo lo conoce, ya que no es algo a lo que enfoquen los medios de comunicación», sostiene Bailey, que llega España después de que le cancelaran una exhibición en Londres por encerrar a actores negros en jaulas. El sudafricano está convencido que la historia llegará al público español, «porque el contexto es diferente, también las costumbres y las referencias, pero el de Macbeth es un relato universal».

En la obra, que ofrece esta tarde su segunda y última representación tras el estreno de anoche, Bailey sitúa sobre el escenario una orquesta en directo y a los intérpretes acompañados por el coro, aunque el asegura que todo este trabajo, lejos de complicar las cosas, resulta «excitante» gracias a la ayuda que tiene del director de los músicos y del compositor.