Así se ha convertido el excéntrico líder de Foo Fighters en la estrella más maja del rock
El 19 de junio la Ciudad de las Artes y las Ciencias acogerá el concierto de la banda de Dave Grohl, uno de los roqueros más queridos, en su única parada en España
Si hace unas semanas Foo Fighters pedían a sus fans a través de redes sociales que se abrochasen los cinturones porque este año 2020 estaría repleto de sorpresas, parte del misterio se acaba de desvelar: la banda ha anunciado tres fechas en suelo europeo: Berlín (10 de junio), Nimes (16 de junio) y Valencia (19 de junio). El único concierto en territorio nacional que Dave Grohl, Pat Smear, Nate Mendel, Taylor Hawkins, Chris Shiflett y Rami Jaffee se celebrará en la Ciudad de las Artes y las Ciencias , y quedará sin duda grabado en la memoria de Valencia como uno de los eventos musicales más importantes de la historia de la ciudad.
Con más de 27 millones de copias vendidas e innumerables premios de primera categoría (Grammys, Brit Awards, MTV, NME Awards…), estadios agotados por el mundo entero e himnos generacionales de la talla de «Everlong», «The Pretender» o «The Best Of You» en su repertorio, Foo Fighters es, a día de hoy, uno de los nombres más poderosos del rock moderno.
Su líder, el ex Nirvana Dave Grohl , es además uno de los músicos más respetados de la escena internacional (incluso tiene el premio «Godlike Genius» -«Genio divino», entregado por New Musical Express sólo y exclusivamente a las estrellas más rutilantes del rock), pero también de los más queridos . ¿Por qué? Hay varias anécdotas que pueden explicarlo.
Para empezar, sobrevivió a la muerte de Kurt Cobain y por extensión de Nirvana (abajo, su primer concierto con ellos), un logro realmente difícil de conseguir a nivel emocional y profesional.
Desde que formó los Foo Fighters en 1994, sólo unos meses después del escopetazo de Cobain, Grohl se ha labrado un amplio y entrañable de detalles con sus seguidores. En 2016, un grupo de música llamado Black Leaves of Envy, formado por chavales de quince años, tuvo un problema con las autoridades de Cornwall (Inglaterra), por el ruido que hacían con sus ensayos en su garaje. Un impulso de lo más naif les hizo escribir una carta a Grohl, pidiéndole ayuda ... y al cabo de unos días, el rock-star salió en defensa de los muchachos con una carta dirigida al ayuntamiento de la localidad. «Estamos llorando de emoción», dijeron los chicos al ver el gesto. «La música no es solo un pasatiempo saludable, es una maravillosa y creativa salida para los niños, y fomenta el sentido de comunidad necesario para el desarrollo emocional y social de cualquier niño. Es tremendamente importante», decía la misiva de Grohl, que terminaba suplicando al ayuntamiento que fuera indulgente con los niños que ensayan en garajes y sótanos, «y que pueden no tener otros recursos para que su pasión prospere».
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— Foo Fighters (@foofighters) March 23, 2016
También dejó alucinados a los habitantes de Cesana (Italia), cuando éstos organizaron un concierto con un millar de baterías para pedirle a Foo Fighters que tocarana en la ciudad. En cuanto vio este vídeo, Grohl dijo: «para allá que vamos».
Cuando va a conciertos, Grohl siempre es uno más entre el público . En lugar de refugiarse en zonas VIP, el líder de Foo Fighters ha sido visto en varias ocasiones con el resto de la gente, como en este de Metallica, donde otros espectadores se quedaron de piedra al reconocerle.
En sus conciertos puede pasar de todo, como por ejemplo, que su hija Harper, de ocho años tome los mandos de la batería . Ocurrió en Islandia hace un par de años, y el tema interpretado por la niña fue «We Will Rock You», el himno de Queen.
Grohl suele darlo todo por sus fans , hasta el punto de no suspender una gira tras romperse una pierna. El accidente ocurrió en 2015 en la localidad sueca de Gothenburg, en el que se dislocó el tobillo y se rompió el peroné tras una caída desde el escenario. La gira continuó con el músico tocando y cantando sentado, pero lo mejor es que cuando volvió al escenario de la caída, tres años después, gastó una broma al público «cayéndose» de nuevo.
El respeto por los compañeros es otra de la virtudes de Grohl. Cuando fue aceptado en el Salón de la Fama del RocknRoll, no se olvidó de los baterías que pasaron por Nirvana antes que él. «Poca gente sabe que yo fui el quinto baterista del grupo», dijo al subir al atril para recibir su premio.
Una de las facetas más admirables de Grohl es su capacidad para involucrarse en multitud de proyectos , algunas veces simultáneos. Además de con los Foo Fighters, ha tocado con Queens of the Stone Age y Them Crooked Vultures, y ha colaborado con Cat Power, Garbage, Killing Joke, Paul McCartney, David Bowie, Guns 'N' Roses o Jimmy Page. Ah, y otra de las cosas que más le conectan con el público rockero es su afición por los conciertos secretos e íntimos en pequeños locales . También tocó en los garajes de varios de sus fans, durante el rodaje de un documental sobre el grupo.
Grohl tiene muchos detalles sobre el escenario , como subir a niños a tocar con él, parar peleas entre el público o dedicarle «My Hero» a un fan que no paraba de llorar por la emoción de verlos en directo.
Pero fuera del escenario, también los tiene: por ejemplo, es famoso por sus barbacoas solidarias . Una vez se puso a cocinas salchichas y hamburguesas en plena calle para los bomberos de Calabasas (la localidad donde falleció Kobe Bryant), durante los devastadores incendios de California en 2018. También suele hacer barbacoas solidarias con un banco de alimentos todos los años, unos días antes de Navidad. Y es que Grohl, antes que rockero, es un buen tipo.
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