Eduardo Mendoza, a vueltas de nuevo con Savolta
Eduardo Mendoza, a vueltas de nuevo con Savolta - efe
libros

Eduardo Mendoza: «Cada vez que publico un libro me dicen que Savolta era mejor»

Sale a la luz «La verdad sobre el caso Savolta», cuarenta años después, con su título original

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

La mejor prueba de cómo la sociedad española avistaba el final del franquismo la tenemos en dos informes de la censura sobre «Los soldados de Cataluña», novela editada por Seix Barral y firmada por un entonces desconocido Eduardo Mendoza. El primero, 14 de septiembre de 1973, ordena el cambio de título de lo que califica de «novelón estúpido y confuso, escrito sin pies ni cabeza…» con «casamientos, cuernos, asesinatos y todo lo típico de las novelas pésimas escritas por escritores que no saben escribir».

El segundo, del 19 de abril de 1975, presenta un estilo bien diferente. La novela, rebautizada como «La verdad sobre el caso Savolta» –título sugerido por Pere Gimferrer, frente al de «Puños y besos» que proponía el autor– es elogiada: «A la trama detectivesca, basada en una rica descripción de los personajes, se suma una buena dosis de humor e ironía con los que llega a rozar los límites de la tragicomedia clásica».

Cuatro días después de la autorización, en el Sant Jordi de 1975, la primera novela de Eduardo Mendoza veía la luz. El segundo censor veía que las cosas estaban cambiando y los lectores opinaron lo mismo: cuarenta años después, Seix Barral publica una edición conmemorativa que recupera el título de 1973: «Los soldados de Cataluña». Inspirada por la copla popular que amenizaba corros infantiles –«Quisiera ser tan alto como la luna para ver a los soldados de Cataluña»– era, como explica Mendoza, «una expresión que infantilizaba un poco una historia con traficantes de armas, gánsters y atentados con bombas: la imagen oficial de Cataluña en los 70 era la de un pueblo laborioso, un pelín tacaño y muy ordenado… Yo hablaba de una sociedad violenta y poco legal. La censura entendió lo contrario: que “Los soldados de Cataluña” era un llamamiento al separatismo. Hoy dudo que mucha gente conozca aquella copla».

Además de los expedientes censores, la presente edición incluye artículos de García Hortelano, Vázquez Montalbán o Félix de Azúa que verifican cómo aquella novela que parecía que «iba a durar cuatro días» se convirtió en el primer long seller de Mendoza. Desde entonces, señala, «cada vez que publico un libro me dicen que Savolta era mejor». Aunque se ilustre con la portada del 75, el escritor se muestra preocupado: «Me temo que mucha gente se creerá que es una nueva novela y pensará que soy un listillo que recicla materiales antiguos», ironiza.

Ver los comentarios