El templo de Karnak desvela una vez más los secretos del Antiguo Egipto

Un grupo de arqueólogos franceses y egipcios han descubierto 38 objetos escultóricos en el templo de Karnak relacionados con el Antiguo Egipto. El hallazgo de este tesoro escutórico se ha realizado, más concretamente, en un pozo ubicado cerca del edificio consagrado a Ptah (el dios de los arquitectos de esta cultura milenaria) y supone un gran paso en el estudio de esta civilización.

En la excavación (que se han realizado en una «favissa», un lugar destinado a los objetos de culto) han sido halladas un total de 38 piezas escultóricas entre las que se incuyen desde estatuas, hasta objetos preciosos elaborados en caliza. Todos ellos de una gran calidad y, en ocasiones, con incrustaciones de metales y oro.

Los objetos han sido hallados a poco más de dos metros del templo colocados alrededor de la parte inferior de una efigie sedente del dios Ptah.

De acuerdo con el material cerámico encontrado en el pozo y los datos epigráficos, esta colección de estatuas se remonta al siglo VIII-VII aC, lo que marcó el comienzo de la XXV dinastía egipcia.

Los expertos que han realizado este descubrimiento pertenecen al Centro Franco-egipcio para el Estudio de los Templos de Karnak. Este fue fundado con el objetivo de estudiar y restaurar el recinto Amón-Ra en Karnak (Luxor) y, desde octubre del 2008, también se ha dedicado al templo de Ptah, situado en el extremo norte del templo de Amón-Ra.

Construido durante el reinado de Tutmosis III (c.1479 - c.1424 aC), el templo de Ptah fue restaurado, ampliado y adaptado a lo largo del período antes del reinado del emperador Tiberio romano (14-37 dC). Está dedicado al dios Ptah, divinidad asociada con la ciudad egipcia de Menfis.

Una novedosa forma de grabar

Además de por la ingente cantidad de objetos encontrados, el hallazgo se ha hecho famoso debido a que ha sido grabado en vídeo mediante un método completamente novedoso que ha permitido reconstruir virtualmente cada paso del descubrimiento con precisión milimétrica.

Esta técnica consiste en la recopilación de cientos de fotografías tomadas durante el trabajo de campo para hacer una reconstrucción virtual de 3-D de cada paso de la excavación. Mediante la vinculación de estas reconstrucciones fotogramétricos con puntos de referencia topográficos muy precisas este método permite localizar todos los objetos después de que se han eliminado y estudiar su distribución en detalle.

En este caso, el descubrimiento ha sido grabado por un topógrafo especializado en arqueología que ha podido reconstruir, gracias al nuevo sistema, cómo se sucedió todo el descubrimiento de la fosa.