Un viaje que dará la vuelta a Sudamérica

Después de tres viajes seguidos de cuatro meses de duración e l Juan Sebastián de Elcano volverá en su 90 crucero de instrucción a realizar una navegación de medio año, como es habitual . Un cambio debido a que los guardiamarinas de la Escuela Naval Militar que hasta ahora realizaban el viaje de instrucción en el cuarto año de carrera han comenzado a hacerlo en tercero y, por eso, en el anterior curso escolar tuvieron que navegar tanto los de de cuarto como los de tercero.

Esa no será la única novedad de una tradicional navegación, fundamental para los futuros oficiales de la Armada, que este año cumple nueve décadas cruzando el océano. Por primera vez al timón estará el capitán de navío Ignacio Paz y, sin duda, tendrá muy presente el consejo que le dio su antecesor en el cargo, el capitán de navío Victoriano Gilabert, que el Juan Sebastián de Elcano es « muy marinero, muy noble , pero que hay que cuidarlo mucho porque tiene ya 90 años».

Bajo su mando, una tripulación formada por 24 oficiales, 22 suboficiales, 125 militares de la escala de marinería y tropa y dos maestros civiles, que sin duda le ayudarán a cumplir la misión del Elcano con éxito. Y es que el objetivo del crucero de instrucción del buque escuela de la Armada española es doble. Por un lado contribuir a la formación marinera, militar, social y humana de los alumnos embarcados, mediante la instrucción y el adiestramiento en la mar y en el puerto y, por el otro, apoyar la acción exterior del Estado mediante la presencia naval en diversos puertos.

En este caso, la «embajada flotante» de España, con unos 70 guardiamarinas a bordo, partirá de Cádiz en su 90 crucero de instrucción en el mes de febrero. «Será muy atractivo, marinero y exigente», advierte el capitán de navío Paz. Sus marinos tienen por delante la vuelta a Sudamérica, pasando de Atlántico a Pacífico por el Estrecho de Magallanes y retornando al Atlántico por el Canal de Panamá. El 75% de los seis meses de viaje estarán en la mar y el 25% restante en puerto, lo que supondrá realizar tres navegaciones de larga duración, es decir, de no menos de 20 días, tratando de navegar a vela el máximo tiempo posible.

El primero de los puertos que tocarán será Las Palmas y, después, rumbo a cruzar el océano Atlántico, pasando al Pacífico por el Estrecho de Magallanes y volviendo al Atlántico por el Canal de Panamá, por lo que, aunque aún están por concretar todos los puertos en los que recalará el Elcano, seguro arribará en Punta Arenas y Valparaíso, en Chile. Este país latinoamericano además organiza la regata ‘Velas Latinoamérica 2018’, de grandes veleros buques escuela, en la que tendrá la oportunidad de participar el Juan Sebastián de Elcano. «Vamos a tener la maravillosa experiencia de coincidir, convivir, navegar y disfrutar en puerto con nuestros compañeros de los buques escuela de marinas tan queridas como son las de Iberoamérica», explica el comandante.

Con las importantes obras de mantenimiento y modernización que Navantia está llevando a cabo, el Juan Sebastián de Elcano navegará seguro y a pleno rendimiento y mostrará en esta regata que, (aunque la marina italiana no esté del todo de acuerdo), es el barco más bonito del mundo.