INDUSTRIA

La tecnología gaditana conquista el Reino Unido

La subestación eléctrica ‘Andalucía II’, construida en el astillero de Puerto Real, domina el nuevo parque eólico de Iberdrola en el Mar del Norte

LA VOZ visita el nuevo campo eólico a 50 kilómetros de la costa inglesa, que se inaugura a mediados de 2020

Imagen de la subestación 'Andalucía II', construida en la Bahía y ahora en el complejo eólico-marino del Mar del Norte LA VOZ

Javier Rodríguez

Un esfuerzo titánico para hacer realidad un proyecto faraónico del siglo XXI. Las cifras que rodean al parque eólico-marino East Anglia One , de Iberdrola , en aguas inglesas del Mar del Norte, son astronómicas. La compañía eléctrica española ha iniciado las primeras pruebas del que es uno de los mayores complejos de Europa en materia de energía renovable. No ha sido nada fácil instalar un centenar de molinos de viento para producir electricidad a 50 kilómetros de la costa inglesa, justo enfrente de Holanda. El coste de este parque supera los 2.500 millones de euros y su gestación arrancó en 2009 con los primeros avances de ingeniería para su construcción. Iberdrola ha aprovechado estos días la celebración en Londres de la Semana de la Energía Eólica para presentar en sociedad su tercer parque eólico que, según las previsiones, se inaugurará a mediados de 2020.

Uno de los mensajes que resume el nacimiento de este complejo lo ofreció, precisamente, el presidente de la compañía, Ignacio Sánchez Galán , durante un encuentro con el equipo directivo de la obra. Galán dijo que el factor humano de una empresa es la clave de su prosperidad y destacó que «las empresas son sus trabajadores y el mejor ejemplo de ellos es el nacimiento de este proyecto». La construcción de East Anglia One está sirviendo para impulsar la incipiente industria eólica marina en Europa, dando ocupación a más 1.300 personas en varios países -entre ellos España, Reino Unido, Países Bajos o Emiratos Árabes Unidos- y siendo clave para varios sectores industriales, incluido el naval.

LA VOZ ha visitado desde un helicóptero el nuevo parque eólico de Iberdrola, cuyo corazón es gaditano . La subestación que transforma la tensión eólica en electricidad y la envía a la costa un centro de distribución se construyó entre 2017 y 2018 en el astillero de Puerto Real. La plataforma 'Andalucía II'’ , así es como se bautizó a esta estructura, reina hoy en el Mar del Norte. La ingeniería de la Bahía de Cádiz ha conquistado el Reino Unido.

Uno de los artífices de que este complejo sea hoy una realidad es el director de Proyectos de Iberdrola, Álvaro Martínez Palacios , que avanzó como la primera fase de la puesta en marcha de esta infraestructura ha sido un éxito al comprobar como las turbinas, el cable submarino, la subestación y el centro de distribución de la costa, en el condado inglés de Suffolk, funcionan sin problemas.

En estos momentos ya se han instalado 51 de los 102 aerogeneradores que integran el parque, cuyos 714 megavatios (MW) de capacidad serán capaces de abastecer electricidad limpia a alrededor de 630.000 hogares británicos.

De Denham a Suffolk

La visita al complejo arranca en el aeródromo de Denham , a 18 millas al este de Londres, donde un operativo de Aviación General tiene su emplazamiento. Desde este punto despega el helicóptero y enfila hacia la capital para alcanzar posteriormente el condado de Suffolk , donde se encuentra la subestación terrestre del parque , en la localidad de Burstall . Iberdrola ha realizado en este entorno de la costa un plan medioambiental de reforestación para la recuperación de flora y fauna. El Reino Unido queda ya a nuestras espaldas, mientras que el Canal de la Mancha se vislumbra a la derecha y, al fondo, a cincuenta kilómetros, emergen como lapiceros los aerogeneradores. En mitad de la inmensidad reina la subestación gaditana. Un barco-grúa sigue colocando los tubos del resto de molinos, mientras que varios cargueros transportan material para las jackets. Cientos de empresas subcontratadas están implicadas en la construcción de este complejo marino que ocupa en el mar la misma superficie que 40.000 campos de fútbol. De hecho, la plantilla que trabaja en su construcción ha recibido formación especial en piscinas especializadas para combatir cualquier contingencia meteorológica en mitad del mar durante la jornada laboral.

El East Anglia One inicia con éxito las primeras pruebas para transformar tensión eólica en electricidad

Iberdrola presentó en Londres el documental ‘Unidos por el Viento’, que refleja el lado más social del desarrollo de una instalación industrial tan emblemática como el parque East Anglia One. Es el factor humano al que hacía referencia el presidente de la compañía, Ignacio Sánchez Galán. A través de los testimonios de una veintena de trabajadores , tanto de Iberdrola como de diversos proveedores, el reportaje transmite una serie de mensajes de calado que caracterizan a este proyecto global: se habla de trabajo en equipo, de compañerismo para superar los retos, de multiculturalidad, de efecto tractor, de impulso al empleo local, de formación, de sostenibilidad medioambiental, de reto tecnológico, de seguridad para encarar a condiciones meteorológicas extremas... Es el caso de dos trabajadores de la industria auxiliar naval de Galicia, José Luis Ponce y José Luis Allegue , de la empresa de andamiajes Neosic, que han participado en la construcción de 42 de los 102 molinos que forman el parque. Sostienen que el negocio offshore es el futuro y recuerdan que es, de momento, una carga de trabajo segura para las factorías de Navantia . No hay que olvidar que los astilleros españoles se han convertido en proveedor de Iberdrola para la construcción de los complejos eólico-marinos. Así, las plantas de Fene y Puerto Real ya han participado activamente en la infraestructura del parque Wikinger , promovido por Iberdrola en aguas alemanas del Mar Báltico, y a pleno rendimiento desde octubre de 2018.

Instalación de aerogeneradores LA VOZ

El complejo East Anglia One es la segunda oportunidad que ha brindado Iberdrola a Navantia en materia offshore y el resultado ha sido óptimo. De hecho, el tercer complejo eólico-marino que promueve la eléctrica española en aguas de la bretaña francesa, el Saint Brieuc , ya está en fase de adjudicación de infraestructura y ha sido el astillero de Navantia-Fene el que se encargará de construir las jackets o plataformas para sus 62 molinos. El astillero de Puerto Real confía en la adjudicación de la obra de la subestación eléctrica de este complejo, que sería la tercera en su particular curriculum.

Una larga travesía

La presencia de la subestación 'Andalucía II' en el Mar del Norte centra la atención de un parque que se expandirá en los próximos años hasta culminar sus tres fases. La plataforma gaditana es una mole de 3.900 toneladas y 51 metros de altura por encima del nivel del mar , mientras que su anclaje en el fondo marino lo permiten los 42,5 metros de estructura que sirven de cimentación justo debajo del agua. Los ingenieros de Iberdrola ubicaron en agosto de 2018 la subestación en su emplazamiento definitivo. La instalación energética partió del astillero de Puerto Real a primeros de agosto y recorrió sin incidencias, a bordo una barcaza remolcada por el buque AMT Commander, 1.333 millas náuticas (2.468 kilómetros).

Trabajadores de la idnustria auxiliar naval gallega que han participado en la obra LA VOZ

La subestación 'Andalucía II' es el núcleo central del parque marino de Iberdrola East Anglia One. Su función consiste en recoger la energía eléctrica producida por los 102 aerogeneradores y transformar la tensión de 66 kV a 220 kV . Posteriormente, la electricidad se transmitirá por un cable submarino hasta tierra.

La 'Andalucía II' es la mayor subestación marina en corriente alterna construida en el mundo e incluye innovaciones de diseño planteadas por Iberdrola gracias a las cuales se ha conseguido una estructura más compacta, que permitió su instalación gracias a un barco especializado en el sector de eólica marina. «La subestación marina es la mayor y más compleja estructura de una pieza de este parque», dijo en su momento Charlie Jordan , director de proyecto de ScottishPower Renewables para East Anglia One .

Navantia cumplió de manera escrupulosa con los plazos de entrega de esta estructura . El astillero de Puerto Real la construyó en 16 meses y permitió la generación de una media de 450 empleos que, en momentos punta de trabajo, fue de hasta 600 personas.

Navantia ha sido un proveedor clave en este macrocomplejo inglés que lleva sello gaditano

Esteban García Vilasánchez , entonces presidente de Navantia, agradeció a Iberdrola la oportunidad de demostrar las capacidades de los astilleros para desarrollar programas tan de vanguardia en un sector de futuro como el eólico marino. De hecho, Vilasánchez ya adelantó en el acto de entrega de la plataforma 'Andalucía II' que la eólica era la carga alternativa de trabajo para los astilleros públicos. «Se trata de una línea de negocio de diversificación clave para Navantia que complementa la actividad principal, el mercado naval de defensa como empresa estratégica al servicio de la seguridad nacional, tal y como refleja el plan estratégico de la Compañía», destacó entonces.

Alvaro Martínez, director de Proyectos de Iberdrola

El helicóptero enfila el regreso a la base, mientas se advierte que la instalación que se aprecia ahora desde el cielo ha tenido todo tipo de reveses en su desarrollo. La construcción del complejo ha superado problemas técnicos y arqueológicos . La instalación, por ejemplo del cable submarino se topó en el fondo con un submarino hundido durante la I Guerra Mundial, además las prospecciones que se hicieron para las jackets detectaron un yacimiento arqueológico de 6.500 años de antigüedad en el área de Suffolk, cuya calidad no tiene precedente alguno en toda esta zona.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación