SUCESOS
Dos militares de Rota, detenidos como miembros de la red que traficaba con cocaína en la Sierra y la Bahía
Los dos soldados se encargaban presuntamente de financiar la compra de la droga a un vendedor de La Barca de la Florida para después llevarse beneficios
En la operación desarrollada por la Policía Nacional han sido arrestadas 29 personas que movían grandes cantidades de esta sustancia en El Puerto, Puerto Real, Jerez, Arcos, La Barca, Paterna y Lebrija
Un pescadero usaba su furgoneta de reparto para distribuir a domicilio la 'coca' a los diferentes puntos
Tras un punto de venta de droga situado en alguna de las barriadas más castigadas por este tráfico de cualquier municipio se puede encontrar mucho más si se escarba bien . Si se sabe tirar del hilo y conocer la procedencia exacta de esa sustancia y cómo llega hasta ahí. Y eso es lo que han hecho los agentes del Grupo de Estupefacientes de la Comisaría de la Policía Nacional de El Puerto en una investigación que ha durado meses, desde noviembre, y que además ha contado con el apoyo y la total colaboración del Servicio de inteligencia y seguridad de la Armada en la Bahía.
De desarticular dos activos puntos de venta de menudeo en el barrio de la Revolera de El Puerto a destapar toda una red de personas que se dedicaban presuntamente a suministrar grandes cantidades de cocaína por otros municipios de la Bahía y la Sierra de Cádiz. Y entre todos los investigados (29 en total) dos militares. Según ha podido saber este periódico, estos supuestos implicados son dos soldados de unos 25 años que trabajan en la Base de Rota pero que además, a tenor de la investigación policial, se sacaban un buen sobresueldo financiando la compra de esta droga a un vendedor de La Barca de la Florida para que éste pudiera proveerse. Una vez que 'colocaba' las papelas les daba a cada uno de ellos la parte del beneficio que habían acordado. Los dos militares fueron detenidos el pasado 17 de octubre en la última fase de la operación, bautizada como 'Primate'.
En total en esta operación se han detenido a 29 personas . Se les acusa de formar parte de un grupo, «completamente estructurado y jerarquizado» que se había convertido en «la mayor red de distribución de cocaína en la comarca de la Sierra de Cádiz». Y que también tenían una buena clientela en otras localidades de la Bahía como El Puerto y Puerto Real, además de Jerez, donde se asentaban los cabecillas de la organización.
Como decíamos, la investigación se inició en El Puerto el pasado mes de noviembre. Los agentes tuvieron constancia de varios puntos de venta de droga en el barrio de la Revolera. Los agentes pudieron identificar a las personas que estaban detrás de esos 'dispensarios' de droga y además verificaron que había dos pisos en los que se traficaba y otros dos que servían para guardar el dinero que iban obteniendo y evitar así que se les fuera intervenido si había cualquier registro sorpresa. Los dos puntos contaban con todas las medidas de seguridad que suelen frecuentar estos traficantes como puertas blindadas y cámaras de vigilancia para dificultar el acceso a la Policía.
Sin embargo, una vez obtenidos los mandamientos judiciales y con apoyo de agentes de la UPR de la localidad pudieron entrar en dichos puntos y confirmaron sus sospechas. Encontraron 500 gramos de cocaína en roca (lista para ser cortada y preparada para su venta) y unos 4.000 euros en efectivo, en billetes fraccionados.
Sin provisión durante el confinamiento
Durante las vigilancias que efectuaron, los investigadores observaron como durante el Estado de Alarma al no tener provisión de droga suficiente, este clan de El Puerto se puso en contacto con otro clan ubicado en Lebrija. Ese grupo fue desarticulado en septiembre deteniendo a tres de sus miembros. Utilizaban a sus parejas para ocultar las viviendas y los vehículos adquiridos a raíz de las ganancias del negocio ilícito, según ha detallado la Policía.
Pero además y en la segunda fase de la operación los agentes accedieron a otra pieza fundamental. El clan de El Puerto también se abastecía de otro proveedor de Paterna y La Barca. Se trataba de un pescadero que usaba su negocio para distribuir la droga. En la furgoneta de trabajo dispensaba a domicilio la droga que le iba llegando a diferentes vendedores de la provincia, como, por ejemplo a los de la Sierra.
De esta forma, tras seguimientos y análisis de las rutas utilizadas por el pescadero, se localizaron los puntos de venta de cocaína de los diferentes miembros del clan en Arcos, Paterna de la Rivera y La Barca de la Florida, así como un punto en la Bahía, Puerto Real. Y ahí se tuvo conocimiento de la implicación que también tenían estos dos militares. En estos puntos, además de cocaína, se pudo intervenir hachís y cogollos de marihuana procedente de una plantación que poseía uno de los investigados.
Además se pudo comprobar que las parejas de algunos de los investigados tenían un perfil muy activo en la trama, ejerciendo tanto de vendedoras como de enlace entre sus parejas y el principal distribuidor de cocaína.
En la última fase de la investigación se identificó al clan de Jerez, formado por los tres principales distribuidores de cocaína que también fueron detenidos. Los miembros de este clan ocupaban el escalón más alto de la jerarquía de la organización, y del cual se abastecía la persona dedicada a la pescadería.
Este clan vendía aproximadamente un kilo de cocaína al distribuidor cada dos semanas más o menos, ya que surtía con gran rapidez al resto de vendedores, «además de dar las órdenes en cuanto la forma y los tiempos del reparto de la sustancia».
En los registros domiciliarios comprobaron las medidas de seguridad utilizadas para evitar el acceso de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad a las viviendas y el decomiso de las sustancias estupefacientes, al contar con portones blindados y falsos fondos en los armarios donde escondían la cocaína. Incluso dos de las viviendas estaban comunicadas por su interior para facilitar la huida en caso de acceso a una de las viviendas.
Actualmente, la investigación sigue en curso por parte de la Policía Nacional con el objetivo de identificar los orígenes, flujos y el paradero de ganancias ilícitas. Hasta el momento se ha solicitado el bloqueo de forma preventiva de 31 cuentas bancarias, el embargo preventivo de diez viviendas, 28 vehículos y una embarcación.
En total se ha intervenido 1.860 gramos de cocaína, 170.000 euros en efectivo aproximadamente, 15 vehículos, 421 plantas de marihuana, 1.500 gramos de cogollos de marihuana, 359 gramos de hachís, 200 comprimidos de anabolizantes, así como un revólver y cuatro rifles de caza con silenciadores y miras telescópicas.
Los investigados pasaron a disposición judicial y cinco de ellos han ingresado en prisión preventiva. El pescadero, el supuesto cabecilla de Jerez y otros tres que suministraban la droga en La Barca, Arcos y Puerto Real. Todos los presuntos miembros de la red están acusados de los delitos de pertenencia a organización criminal, tráfico de drogas y, algunos de ellos, de tenencia ilícita de armas.
