PLAYAS
El imposible baño en silla de ruedas en una playa de Cádiz
Bañistas con movilidad reducida de Cádiz critican la ausencia de servicios adaptados y socorristas que los atienda en el módulo frente al IES Drago
Un módulo de playa abierto pero sin servicios ni personal para atender a los usuarios con movilidad reducida. Esa es la situación que han vivido un grupo de personas en silla de ruedas esta semana en la playa gaditana situada junto a la escalera de caracol, a la altura del IES Drago.
Se trata de una playa con bandera azul pero sin socorristas que posibiliten el baño a las personas con dificultad de movimiento. El pasado domingo, cuentan, no pudieron bañarse porque el módulo estaba cerrado a pesar de ser temporada alta de playas.
Este martes el módulo está abierto, cuenta con dos duchas y dos lavapiés pero, según señalan, sigue sin haber ningún socorrista que les atienda. Asimismo, critican que sea segunda quincena de julio y tampoco haya aún manguera de conexión a los grifos para que, aunque no puedan bañarse, puedan refrescarse en el módulo.
Este grupo de ciudadanos va a trasladar su «indignación» al Ayuntamiento por «no cumplir» con un servicio ciudadano básico en una ciudad que se presenta al mundo como un destino turístico de primer orden.
El servicio de socorrismo asume, entre otras competencias, la asistencia al baño, mediante sillas anfibias, a personas discapacitadas o con movilidad reducida, en los puntos accesibles.
