Día Mundial de Árbol

En Cádiz se anda por las ramas: un paseo por sus árboles más pintorescos

Un recorrido por los árboles más significativos de la capital gaditana: se cuentan numerosas especies de árboles centenarios entre Ficus, Dragos, Metrosidero, Araucarias, cipreses, olivos, jacarandas...

Antonio Vázquez

José María Aguilera

Cádiz de rama en rama en el Día Mundial del Árbol 2022 . La capital brilla por su luz, por el mar y por sus gentes. Pero de su tierra también brotan maravillas que a simple vista pueden pasar desapercibidas , aunque lleven ahí toda una vida. A su propia sombra, erguidos aunque cada cual a su manera. Silenciosos, resistentes, aguantando vientos y temporales, orgullosos y alegres.

Son los árboles de Cádiz. Se cuentan hasta 57 especies de árboles , muchos de ellos centenarios, entre Ficus, Dragos, Metrosideros, Araucarias, Laurel de Indias, Pinos, Jacarandas, Almez, Olivos, algunas Palmeras, Ombús, Cipreses e incluso un Madroño.

Agarran bien en la tierra de Columela y Celestino Mutis . El clima es idóneo para las numerosas criaturas que llegaron desde el otro lado del charco, la hermana sudamericana. También para aquellas que desembarcaron desde las antípodas. La suave temperatura es aliada. El levante y los vendavales, enemigos. El tiempo, su testigo.

Le invitamos a recorrer los árboles más distinguidos de Cádiz. Por su edad, por su porte, por sus flores y su belleza, por su historia y su leyenda. Siempre por algo. Una mirada al interior desde el exterior. Un vistazo al Cádiz que casi inalterable permanece.

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Antonio Vázquez

Ficus del Mora

Símbolo de la ciudad de Cádiz. Es el árbol del Mora (en realidad es una pareja), al estar junto al edificio del antiguo hospital del mencionado nombre y que ahora es la facultad de Empresariales. Estos ficus (Ficus Macrophylla) impresionan por su enorme tamaño, las dimensiones de sus troncos (perímetros de 9.8 y 10.5 metros) y sus ramas, que obliga a usar apoyos artificiales para que no se quiebren. Un árbol centenario que se ubica frente a la playa de La Caleta, ante el Balneario de la Palma, y que es propio de las estampas de turistas y oriundos.

Ha aguantado temporales de lluvia, vendavales, y se yergue altivo, colosal. Su historia es legendaria. Iba con destino al norte de España pero una de las monjas que lo traía en el viaje enfermó y decidieron quedarse en Cádiz, donde lo plantaron en los primeros años de 1900. También los dos de la Alameda.

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L. V.

El Drago del Parque Genovés y el del Obispado

La mitología narra que cuando Hércules mató al gigante Gerión, de su sangre brotó un drago. Esta especie milenaria está muy asociada a historias y leyendas, y hay testimonios escritos de dragos en Cádiz en la época de asentamiento romano .

Se estima que el drago del Parque Genovés, junto al Parador de Turismo, tiene más de 300 años y es el más antiguo de la ciudad. Muchos recuerdan el antiguo Drago en el Callejón del Tinte (en el patio de la antigua Escuela de las Artes), que se desplomó hace pocos años, y el actual en la sede del Obispado, en calle Hospital de Mujeres. Hay otros más jóvenes en Antiguo Gobierno Militar, Avenida 4 de diciembre y Felipe Abárzuza. Le atribuyen propiedades curativas.

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Antonio Vázquez

Ficus Alameda

Los hermanos de los ficus del Mora , menos famosos por la distinta ubicación aunque les acompaña la misma historia pues son familia. Este par fue plantado en la Alameda Apodaca, siendo dos de las joyas de este jardín de Interés Cultural con vistas a la Bahía de Cádiz. De 1903, de un impresionante desarrollo y la robustez propia de la especie.

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LA VOZ

Palo borracho (Chorisia)

Chorisia, Palo Borracho o incluso Palo Rosa. De bellas flores y formas sinuosas . Es originario de Argentina, Paraguay y Brasil y en Cádiz destaca el del parque Genovés, aunque no es el único. También se ubica otro en la calle Montañés, entre la plaza de las Tortugas y Canalejas.

La 'Ceiba speciosa' es familia de los famosos Baobab. Peculiar, compuesto en su mayor parte de agua, es capaz de realizar la fotosíntesis cuando faltan las hojas. Forma cilíndrica, como un tonel, el del parque ronda los 10 metros de altura.

5

LA VOZ

Araucaria en el Parque Genovés

Uno de los árboles más distinguidos. Y el más alto. En Cádiz se eleva por encima de todos en el parque Genovés, alcanzando casi los 30 metros . Destaca especialmente por su belleza, la forma de sus ramas y hojas (parecidas a un árbol de Navidad), la araucaria excelsa es un árbol endémico de la Isla de Norfolk, al este de Australia. si bien el nombre del género deriva de su procedencia de una región chilena. En la Tacita se pueden contemplar en el Parque Genovés, Alameda de Apodaca y Marqués de Comillas, Plaza de Candelaria y Calle Tinte.

6

LA VOZ

Metrosidero: el árbol del hierro

El árbol del hierro: metro (médula) y siderus (hierro) . Originario de Nueva Zelanda, es impresionante en su desarrollo. Enorme y de durísima madera, ha vivido y sufrido desgraciados acontecimiento como el incendio de la pérgola de Santa Bárbara, que afectó a parte del follaje.

Tiene cerca de dos siglos. Junto al de La Coruña, es de los primeros metrosideros documentados de Europa. El nombre específico excelsa, por grande grande ; antes conocido como tormentosa, alude al pelo o tomento de sus hojas. El del parque Genovés es el ejemplar centenario más importante de Europa que, junto a otro de menor porte en el norte, constituyen los dos ejemplares documentados más antiguos en este continente. Como apunta la web municipal, hay especies más jóvenes. en los Jardines del Paseo de Carlos III, Paseo de Canalejas, Alameda Apodaca, C/Rochester, Cortadura, etc.

7

L. V.

El árbol de Judas, el árbol del amor (Cercis siliquastrum)

Cuenta la leyenda que Judas Iscariote, arrepentido tras haber vendido a su maestro Jesús por 30 monedas de plata, se ahorcó en un 'Cercis siliquastrum'. De ahí que este ejemplar reciba simbólicamente el nombre de 'el árbol de Judas' o 'el árbol del amor', por la forma de corazón de sus hojas.

En Cádiz existe una cantidad importante de esta variedad , en alineaciones de calles o en parques como la plaza de España, que se puede observar en la imagen. Preciosa floración, es un caducifolio de talla pequeña y alcanza normalmente de cuatro a seis metros de altura, pero puede llegar hasta los 15 metros.

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P. E.

Jacaranda

Incomparable en belleza durante su florecer, con el tono violáceo inconfundible . Visibles en varios puntos, como el parque José Celestino Mutis, la avenida María Auxiliadora y la plaza del Mentidero .

Es originaria de Argentina y se adapta maravillosamente al clima mediterráneo. Entre sus particularidades, absorbe y filtra el monóxido de carbono por lo que es un aliado natural contra la contaminación.

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LA VOZ

Árbol del fuego en Canalejas (grevillea robusta)

La grevillea robusta es de los más fotografiados por su espectacular floración . El rojo y naranja se apodera de sus ramas y parece estar en llamas. De ahí el apelativo del árbol del fuego. Se pueden encontrar salpimentados por la ciudadla. La Avenida de la Sanidad Pública (antigua Juan Carlos I) tiene alineaciones de grevilleas en ambos sentidos a lo largo de la calle, hay ejemplares en alineaciones en calle Colarte y un majestuoso en Canalejas.

Grevillea en honor al botánico inglés Charles Francis Greville, uno de los fundadores de la Royal Horticultural Society. Como curiosidad, su madera es usada en la elaboración de instrumentos musicales como la guitarra.

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Algarrobo

Este magnífico ejemplar de algarrobo (Ceratonia siliqua) también es centenario , si bien se plantó en el Parque Genovés en 2008. Como curiosidad, venía con un defecto en el tronco y por eso se le colocó oculto en la zona del antiguo cortijo de los Rosales, en lugar de la plaza de España.

Pueden alcanzar los diez metros de altura y es una especie de gran rusticidad y resistencia a la sequía, de lento desarrollo. Un clásico del clima mediterráneo , su curioso fruto, la algarroba, se ha puesto en valor tras ser despreciada por considerarse alimento del ganado.

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LA VOZ

Ciprés de Monterrey

El espigado ciprés, símbolo de los camposantos, es de fácil encuentro en esta tierra , pero esta especie originaria de la Bahía de Monterrey (en Estados Unidos) apenas tiene semejantes en la bahía gaditana. Este ciprés de Monterrey se ubica en el parque Genovés. Las obras del teatro han dañado sus raíces aunque de momento aguanta en pie, en un gesto antropomórfico. Como si cualquier día arrancara a bailar.

Es uno de los más antiguos de la ciudad . La madera es usada por artesanos y constructores de botes, además de por ebanistas e interioristas, por lo delicado de su coloración.

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