Pasar el rato

Altura de miras

La autovía extremeña no se construye por tierras cordobesas. Vendrá luego la derecha y nos parecerá que sigue la izquierda

Imagen de un tramo cordobés de la N-432, que debe ser sustituida por la futura A-81 Valerio Merino
José Javier Amorós

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Y allá , lejos, Badajoz . Aunque sepa los caminos, yo nunca llegaré a Badajoz . Precisamente porque sé los caminos. Había una vez una carretera que nunca se convirtió en autovía. Muchos hombres murieron en ella sin haber conocido la felicidad de los cuatro carriles. Resulta más difícil llegar desde Córdoba a Badajoz que a Waterloo , en Bélgica, adonde Puigdemont se fugó a pedir consejo a Napoleón. -Ya que has perdido la guerra de la independencia, le sugirió el emperador, cuídate el estómago. Pedro Sánchez, otro caudillo, se diferencia de la autovía a Badajoz en que él sí tuvo principio.

Y se parece a ella en que tampoco él tendrá final. Es probable que la autovía de Córdoba a Badajoz sea el concepto material de Dios que está buscando Pablo Iglesias : no ha tenido principio ni tendrá fin. En eso consiste la idea de eternidad. Ya que no será posible en este mundo un desplazamiento cómodo, seguro y rápido desde Córdoba , siempre nos quedará el consuelo de rezarle a la autovía . Bendice, señora doña A-81, esta carne de vaca maltratada que vamos a tomar. Y dale al ministro Garzón inteligencia humana. Amén.

No se construye la autovía extremeña por tierras de Córdoba porque el Gobierno considera que no es necesario construir la autovía extremeña por tierras de Córdoba. Argumento genital básico , a la altura de la entrepierna del Gobierno de España. Sánchez, esa fuerza aérea, ve las cosas de un modo distinto a nosotros, menos rastrero, él lo ve todo desde el aire. El tráfico, las vacas de Garzón, la casa de la ministra de Igualdad y la marcha triunfal de la ETA. Ya viene el cortejo fúnebre. No se le puede negar altura de miras. Visto desde el Falcon, el mismo Ayuntamiento de Córdoba parece una mancha insignificante e inofensiva. Una cosa así no puede tener necesidades importantes, ni está en condiciones de exigir que se atiendan. Por eso, el Ministerio de Industria le ha negado su parte del oro de Europa para ayudar al comercio local. Sostiene esa neurona administrativa de Sánchez que el Ayuntamiento no se ha comprometido a poner dinero propio para la operación. Hombre, si el Ayuntamiento de Córdoba nadara en la abundancia, ¿qué necesidad tendría de Europa o del Gobierno de Sánchez? Los caminos, las calzadas, las carreteras carecen de interés para el presidente volador. Por ahí se desplazaban los emperadores romanos y los Reyes Católicos, que han sido excluidos del bachillerato. Por algo será.

Podría suceder que el gran piloto de la destrucción de España tenga pensado , si aquí aprendemos a votar con sentido, establecer una base de helicópteros en el inútil aeropuerto de Córdoba, para que los cordobeses viajeros puedan llegar a Badajoz por el aire. Vendrá luego la derecha y nos parecerá que sigue la izquierda . Nuestras quejas son aire y van al aire. El poder no entiende más lenguaje que el de la fuerza, porque el poder se sostiene sobre la fuerza. Y como en Córdoba no tenemos fuerza, habremos de conformarnos con la poesía. En eso sí que somos buenos. ¡Cómo lloran las carretas, / camino de Badajoz!

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