A qué baño va un transexual: se abre la guerra en Carolina del Norte

Los derechos de los transexuales y la que ya se conoce como «ley de los baños», con la que el estado de Carolina del Norte obliga al uso del servicio según el sexo de nacimiento, un condicionante obvio para quienes han decidido cambiarlo, han convertido la relación entre las instituciones en un campo de batalla jurídico. La Administración Obama y el gobernador, el republicano Pat McCrory, se han enzarzado en una disputa legal, después de que el Estado federal diera un plazo al de Carolina del Norte para retirar la ley, aprobada el 23 de marzo.

El texto legal promulgado, que impide que un transexual utilice los baños públicos de acuerdo con el nuevo sexo que ha decidido adoptar, ya había provocado numerosas reacciones críticas y decisiones de protesta, y no sólo en el mundo político.

Grandes compañías como Paypal, la más conocida gestora de pagos por internet, no invertirán en el estado mientras siga la ley vigente, mientras que célebres cantantes y grupos, como Bruce Sprinsteen, Ringo Starr, Pearl Jam y Boston, han cancelado sus conciertos en Carolina del Norte.

La fiscal general de Estados Unidos, Loretta Lynch, fue contundente al asegurar que «se está violando la Ley de Derechos Civiles, que prohíbe cualquier discriminación, en este caso la que tiene que ver con la dignidad y el respeto a todos los seres humanos». Lynch dio a conocer su demanda contra el ejecutivo estatal después de que hubiera vencido el plazo dado al gobernador para realizar modificaciones.

«Batalla nacional»

Lejos de rectificar, la respuesta del Gobierno de Carolina del Norte fue la de una contrademanda contra la Administración Federal, por «extralimitarse sin ninguna base y flagrantemente en sus poderes». Además, el gobernador aprovechó para proclamar que «desde ahora, esto se convierte en una batalla nacional». La frase no es menor. El ala ultraconservadora del Partido Republicano, que lidera Ted Cruz, con quien comulga el gobernador de Carolina del Norte, pretende que esta formación asuma este principio en la próxima convención de julio, en Cleveland (Ohio).

No es la primera vez que la Administración Obama actúa en favor de los derechos de los transexuales. En un gesto personal, el presidente ya decidió hace algunos años convertir los baños de la Casa Blanca en baños unisex, para acabar con cualquier diferenciación. Para Obama, la ley de Carolina del Norte «va contra los principios de equidad y justicia».