Aunque la pérdida de cabello es una circunstancia que siempre ha afectado más a los hombres, desde hace tiempo los casos femeninos han aumentado notablemente . Se calcula que el 30% de las mujeres sufrirán algún tipo de alopecia a lo largo de su vida.
Existen más de cien tipos, aunque la más común en mujeres es la alopecia androgénica , de origen hormonal y genético. Las afectadas van perdiendo densidad capilar, la raya se les hace más ancha y se ve el cuero cabelludo.
Otro tipo de alopecias que también afectan a las mujeres son la alopecia frontal fibrosante , un tipo de calvicie cicatricial de origen autoinmune y hormonal en la que se suelen perder las cejas y presentar alopecia en la zona de la frente y patillas; y la alopecia areata , la que parece ser que tiene Jada Pinkett, cuyo origen es autoinmune (el sistema inmunitario ataca y destruye por error los folículos pilosos sanos), y en la que aparecen de forma rápida zonas circulares de alopecia, que pueden desembocar en una pérdida generalizada.
No hay que confundirlas con el efluvio telógeno , una caída de pelo intensa pero puntual causada por estrés físico o emocional, que es reversible, ya que el pelo volverá a crecer pasados unos meses.
Antes de poner tratamiento , hay que tener un diagnóstico correcto. El dermatólogo es el especialista al que debemos consultar cuando notemos algún problema en el pelo.
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesión