Narcotráfico cádiz

Vídeo: Los 'herederos' del clan de la Pinilla de Sanlúcar llegaban a vender hasta mil papelinas de cocaína al día

La 'operación Alacrán III' de la Policía Nacional desmonta dos de los 'narcopisos' que tenían y detiene a cinco de sus miembros. Distribuían ya por toda la provincia de Cádiz

Estos puntos de venta estaban «completamente bunkerizados» con hasta tres puertas. Llegaron a quemar decenas de billetes para que los agentes no encontraran pruebas

Nuevo ataque de la Policía Nacional a los narcopisos de Sanlúcar, a los 'herederos' de la Pinilla

M. Almagro

Reventando las puertas, rompiendo rejas y hasta trepando por los balcones tuvieron que entrar los agentes de la Policía Nacional para poder desarticular una de las mayores redes de tráfico de drogas al menudeo que estaba activa en la provincia de Cádiz. Concretamente, en Sanlúcar de Barrameda. En Huerta de San Cayetano, en la Cruz de Mayo. Allí donde han acudido a realizar una tras otra operación antidroga -hasta tres veces en el último año- y otras muchas, desde hace más de una década.

Porque allí se habían asentado los que, supuestamente, habían tomado el testigo de una de las traficantes más potentes que existían hasta hace relativamente poco en Cádiz; en eso de vender papelas de rebujo, de cocaína y de heroína, y que ya fue condenada en sentencia firme por ello y, que posteriormente, hace poco, volvieron a detener. Dolores la Pinilla, ella y los suyos entraban en prisión pero dejaban al parecer su legado a otros.

Y estos otros se dedicaban supuestamente a lo mismo y en el mismo sitio. A dispensar dosis de sustancias estupefacientes las 24 horas del día. Este miércoles, y después de que el pasado diciembre se realizaran los registros y las detenciones, la Policía ha dado algún detalle más sobre la investigación.

Según han confirmado, y tal y como adelantó este periódico, la investigación se inició hace seis meses cuando constataron que este nuevo grupo había tomado el lugar del clan de la Pinilla y que el ir y venir de toxicómanos y la inseguridad se había vuelto a activar en esta humilde barriada castigada por el trapicheo.

Así descubrieron que contaban con al menos dos narcopisos (ya usados por la anterior organización). Estaban localizados en la calle Siembra y desde ellos abastecían de droga a quien se la pagara. Todos y cada uno de los días de la semana. Y a cualquier hora. Como también hacían sus antecesores. La Policía Nacional calcula que llegaban a vender hasta mil papelinas al día y que ya habían empezado a distribuir a 'camellos' de toda la provincia que se acercaban a Sanlúcar a por las dosis que luego vendían en sus respectivos municipios.

Imagen principal - Imágenes de los registros. Abajo, los agentes recuperan los billetes quemados.
Imagen secundaria 1 - Imágenes de los registros. Abajo, los agentes recuperan los billetes quemados.
Imagen secundaria 2 - Imágenes de los registros. Abajo, los agentes recuperan los billetes quemados.
Imágenes de los registros. Abajo, los agentes recuperan los billetes quemados.

Con estas evidencias, y tras realizar vigilancias e interceptaciones, el pasado 22 de diciembre cerca de un centenar de agentes se desplegó por la barriada de la Cruz de Mayo para ejecutar las entradas y registros en tres viviendas investigadas.

Según aseguran, esta nueva estructura tenía su 'sede' en un 'narcopiso' de la calle Siembra que estaba «totalmente bunkerizado». Lo habían protegido con triple puerta de seguridad y doble rejas en las ventanas. Sin embargo todas esas protecciones de armazones, cerrojos y rejas no impidió que los agentes lograran entrar. Así los policías incautaron 288 papelinas en el interior de este piso, además en otros registros se decomisó algo más de un kilo de cocaína.

Y estas extremas medidas de seguridad (cámaras y blindajes) que los vendedores habían instalado tiene su sentido, que no es otro que intentar evitar los registros sorpresa para anular toda las pruebas posibles mientras que consiguen entrar. En este caso, los dos detenidos que se encontraban dentro el día de los registros provocaron un incendio para quemar el dinero procedente de la venta de las cientos de dosis, ya que se trata de una evidencia judicial clave. Sin embargo, los policías actuaron rápido, sofocaron el fuego y recuperaron muchos de estos billetes.

Finalmente, detuvieron a cinco personas que fueron puestas a disposición del Juzgado de Instrucción número tres de Sanlúcar de Barrameda. Tras ser oídos en declaración su titular decretó el ingreso en prisión provisional para el principal investigado y dio la libertad con cargos al resto de los detenidos.

Para la explotación de esta operación se contó con la colaboración del Grupo Operativo de Inspecciones Técnicas (GOIT), una unidad especializada, precisamente, en reventar búnkeres, descubrir dobles fondos y llegar a rescates a sitios de muy difícil acceso, entre otras muchas y costosas labores. Además en las entradas y detenciones actuaron los efectivos de la UPR, radiopatrullas y Unidad Canina. Todos en apoyo de los agentes de la Brigada Judicial de la Comisaría de Sanlúcar que coordinan la investigación.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación