INDUSTRIA

Cautela y decepción en la reunión entre la dirección de Navantia y su Comité Intercentros

Los representantes de los trabajadores se vuelven de Madrid sin saber aún qué carga de trabajo recibirán las factorías

Trabajos de soldadura en la proa de un buque en el astillero de Cádiz A. V.

JAVIER RODRÍGUEZ

CÁDIZ

La reunión que ha mantenido este viernes la dirección de Navantia con el Comité Intercentros de la compañía no ha cumplido las expectativas esperadas por parte de los representantes de los trabajadores. El presidente, Ricardo Domínguez, y su equipo directivo han reconocido que no estaban aún en condiciones de adelantar las líneas maestras que marcarán el nuevo plan de futuro de Navantia, bautizado con el nombre de 'Horizonte 5.0', cuyo principal objetivo es la digitalización, diversificación y carga militar a la que se enfrentarán los astilleros públicos en los próximos años.

Los representantes gaditanos en este foro de debate habían depositado muchas esperanzas en la reunión de este viernes, ya que sobre los astilleros de la Bahía se espera una importante carga de trabajo procedente del nuevo contrato con Arabia, la construcción de un patrullero para Marruecos y los seis buques que demanda Angola, además del BAM-IS de apoyo a submarinos y los dos hidrográficos y el oceánico que ha solicitado la Armada española.

El presidente, según fuentes sindicales, se ha limitado a confirmar que las expectativas de trabajo son buenas, pero no ha entrado en más detalles.«El comité intercentros está profundamente decepcionado por la falta de avance de las negociaciones del plan», afirma el órgano de representación de las plantillas, e incide igualmente en que tampoco se han producido acuerdos significativos en cuanto al convenio colectivo.

Los trabajadores asumen el papel de forzar «el inicio de los procesos», por lo que anuncian que la semana próxima se convocarán asambleas en cada centro para informar en detalle de la reunión y convocar movilizaciones.

El anterior plan estratégico entró en vigor en el año 2019 y finalizó en diciembre de 2022. Este plan ha significado el rejuvenecimiento de la plantilla y el inicio de la transformación del sistema productivo para ganar más competitividad. A nivel de empleo, implicó las salidas de personal a los 61 años, y la reposición del 75 % de las plazas amortizadas en esos cuatro años, alrededor de 2.200 en toda la compañía.

Los representantes de los trabajadores trasladarán ahora a sus respectivas factorías el contenido de la reunión para debatir en asamblea acciones de presión para avanzar algo más en la puesta en marcha de este plan estratégico.

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