La carta de los vecinos de Cádiz a los políticos de cara a las Municipales

En lo que se refiere a la limpieza en los barrios, los vecinos se muestran algo escépticos tras la adjudicación del nuevo contrato de limpieza viaria y recogida de residuos sólidos urbanos de la ciudad a la empresa Valoriza, la tercera oferta que supondrá para las arcas municipales un millón de euros más anualmente tras un largo y tedioso proceso que se prolongará en los próximos años en los tribunales.

Lamentan el estado actual de suciedad y abandono de los barrios gaditanos asegurando que -por parte del equipo de Gobierno- no se ha controlado el cumplimiento del anterior contrato. «Cádiz tiene historia pero ahora además tiene solera de lo sucio que está», asegura la presidenta de la Federación 5 de abril, Pilar García Gutiérrez, añadiendo que «no hay más que pasear por la ciudad para darse cuenta de cómo está. Los barrenderos ni se ven y echamos mucho de menos las cuadrillas de baldeos y de barridos que había antes. Los husillos están atascados y no queremos ni pensar qué pasará cuando empiece a llover porque no se limpian. No hay previsión ninguna».

Los daños que se producen en el mobiliario urbano «no se reparan y algunas zonas presentan un estado lamentable». En cuanto al acerado «se está demostrando la dejadez absoluta de este Ayuntamiento, que permite que las ramas levanten las aceras haciendo muy difícil el tránsito por las calles a muchas personas con movilidad reducida que van en silla de ruedas».

Asimismo, se quejan de los apagones continuos que se producen de manera «inexplicable» en distintas zonas de la ciudad, señala Cándida Grimaldi, que asegura que «en cuanto llamas para comunicar la incidencia parece que le dan a un botón y todo vuelve a la normalidad». En su opinión, «si realmente fuera una avería tardarían más en arreglarlo pero tarda minutos, por lo que parece que las luces se apagan de manera intencionada», apunta.

Estas deficiencias en el alumbrado preocupan a los vecinos, que declaran que en determinadas zonas de la ciudad, por ejemplo algunas calles del barrio de La Laguna, «pueda ser hasta peligroso porque no se ve absolutamente nada», afirma la vicepresidenta de la Federación 5 de abril.

El deficiente estado de muchas calles de la ciudad, que no han sido asfaltadas, también es una queja constante de las asociaciones de vecinos de la ciudad, que reclaman un plan de asfaltado integral en los barrios de la ciudad.

Ante toda esta serie de necesidades prioritarias a solucionar en los barrios, desde esta entidad consideran que se deberían de retomar los denominados distritos ya que «se tenía un control mucho más exhaustivo de cada uno de los barrios y se ponían soluciones de manera rápida y directa», manifiesta Cándida Grimaldi.

Desde la Federación 5 de abril recuerdan a su vez la propuesta realizada por esta entidad sobre la creación de una mesa de mantenimiento urbano, en la que estarían representados el equipo de Gobierno, la oposición, técnicos municipales y los propios vecinos. Esta iniciativa fue incluso aprobada por el pleno municipal en marzo de 2021 pero «como otros muchos acuerdos, ha quedado en un cajón del olvido», señala la presidenta, Pilar García Gutiérrez.

El movimiento vecinal considera que la puesta en marcha de esta mesa «ya va tarde» ya que «la ciudad necesita un mantenimiento íntegro y de manera inmediata porque a medida que pasa el tiempo más difícil será su recuperación».

El incumplimiento de este acuerdo, que requiere la participación de los vecinos «demuestra que les importa tres pitos la ciudad» añadiendo que «no quieren trabajar con nosotros porque cada vez que nos han convocado para algo nos lo han dado todo hecho, sin darnos la oportunidad de aportar nada. Lo tienen todo más que decidido, por lo que la participación que venden es de cara a la galería porque nuestras propuestas no se ven reflejadas en ningún sitio».

Ponen como ejemplo las mesas de trabajo que se crearon para los proyectos a los que se destinarían los fondos europeos Edusi donde, según aseguran, «casi ninguna de nuestras propuestas están reflejadas en la planificación».

Además, de momento, «no estamos viendo ningún resultado en los barrios». Los vecinos alertan de la falta de celeridad del Ayuntamiento gaditano con estos proyectos y alertan de la posibilidad de que muchos de los que se han anunciado para estos barrios no lleguen a ejecutarse porque se pasen los plazos y se pierda el dinero.

Otro de los grandes asuntos pendientes con los barrios y que viene arrastrándose desde hace años es el nuevo pliego de transporte. Lamentan el estado en el que se encuentra la flota de autobuses de la ciudad, «con vehículos que tienen una antigüedad de más de veinte años».

Asimismo, muestran sus quejas por el estado de las marquesinas, «fruto de la falta de mantenimiento a la que hemos hecho referencia anteriormente», o a la diferencia de frecuencias entre unas líneas y otras que deja entrever la «mala planificación existente».

Los vecinos se muestran muy preocupados también por la falta de seguridad en algunas zonas de la ciudad. A los continuos cortes en el alumbrado público se une la ausencia de policías de barrio. «Nos gustaría que volviéramos a contar con los agentes en los barrios porque teníamos un contacto diario con ellos, la relación era fluida y cercana y conocían los problemas de cada barrio y de muchos de sus vecinos. Vivíamos mucho más tranquilos porque siempre teníamos esta referencia».

Respecto al conflicto abierto entre la Policía Local y el equipo de Gobierno por la ruptura de las negociaciones sobre el acuerdo regulador para la totalidad de la plantilla del Ayuntamiento de Cádiz, los vecinos creen que los principales perjudicados de esta situación son los ciudadanos. «Al final los ciudadanos de a pie somos los que pagamos siempre por estas cosas», lamenta Pilar García Gutiérrez.