Dos buques con base en Rota y más de 500 infantes de Marina de San Fernando van a la zona afectada por el terremoto en Turquía para labores de rescate

Según ha explicado la ministra en una entrevista en el informativo de Antena 3 recogida por Europa Press, en las proximidades de la zona hay dos barcos españoles, el buque anfibio portaaeronaves LHD 'Juan Carlos I' y el buque de asalto anfibio 'Galicia'. Cabe destacar que el primero lleva 517 infantes de Marina del Tercio de Armada de San Fernando (un Batallón Reforzado de Desembarco), servicios médicos y, ha subrayado Robles, «mucho material», preparado para el rescate de personas afectadas por el terremoto en Turquía y Siria que ya ha dejado casi 5.000 muertos y se espera que el número de víctimas pueda llegar a las 30.000. Con la previsión de que ambos buques puedan hacer, además, de alojamiento provisional de los rescatados del seísmo.

Estos buques se encontraban en el mar Mediterráneo participando en la operación 'Dédalo-23', un Grupo Anfibio Aeronaval que partió de Rota el pasado 16 de enero, para un despliegue de más de dos meses con el objetivo de «incrementar su adiestramiento y mostrar el firme compromiso de España con la Política de Disuasión y Defensa» de la OTAN. Este despliegue incluye actividades frente a las costas de Italia, Francia y Egipto, por lo que los buques españoles se encuentran relativamente cerca de la zona en la que ha ocurrido el terremoto entre la frontera de Turquía y Siria.

Sobre el 'Juan Carlos I', el mayor buque de guerra construido en España y buque insignia de la Armada, la ministra de Defensa ha explicado que «está preparado para rescate y para intentar llegar, en su caso si fuera necesario, por mar y desde allí desembarcar a los infantes de Marina». Además, este buque anfibio portaaeronaves cuenta actualmente debido a su despliegue en 'Dédalo-23' con una unidad aérea embarcada compuesta por aviones 'Harrier' AV8B+ y helicópteros SeaHawk SH-60B y SH-60F de la Flotilla de Aeronaves de la Armada, así como con lanchas de desembarco LCM del Grupo Naval de Playa y lanchas rápidas 'Supercat'.

Los infantes de Marina embarcados habían partido de San Fernando para realizar durante 'Dédalo-23', según explicó el Comandante General de la Infantería de Marina, general de división Rafael Roldán Tudela, en una reciente entrevista a este periódico «demostraciones de capacidades de 'strike aéreo', precisión a larga distancia y asalto anfibio, además de actividades de vigilancia reforzada de la OTAN, en coordinación con la Alianza y Marinas de países aliados presentes en la región». «La Fuerza de Infantería de Marina es capaz de realizar operaciones de fuerza de desembarco, operaciones especiales en el ámbito marítimo, de seguridad física y marítima y además es capaz de llevar cabo operaciones en tierra como cualquier fuerza terrestre», dijo el general Roldán durante dicha entrevista. «Para ello contamos con tropas capaces de operar con medios terrestres, navales y aéreos» y, como si fuera un presagio de lo que ha ocurrido, subrayó «lo que es más importante, nuestros infantes de Marina son capaces de actuar con iniciativa y adaptarse rápidamente a cualquier situación o cometido, porque ello forma parte de su mentalidad y preparación».

Por otro lado, en cuanto a los dos aviones que han partido -uno de la Unidad Militar de Emergencias (UME) desde la Base de Morón, y otro desde Torrejón con Bomberos de la Comunidad de Madrid- rumbo a la ciudad turca de Adana, la titular de Defensa ha asegurado que «la idea» es que se pongan a trabajar «inmediatamente».

No obstante, sendos aviones no pudieron aterrizar este lunes en el aeropuerto de Adana, que se encontraba congestionado y sus vuelos fueron desviados a Anatolia.

Desde Anatolia, según detalla la agencia de noticias Europa Press, intentaron acceder por carretera a la zona del seísmo pero fue imposible hacerlo debido a que es un viaje de más de doce horas y muchas de las carreteras están cortadas, además del cuantioso material de rescate con el que viajan. Por ello, que han volado hasta Adana este martes para iniciar inmediatamente las labores de búsqueda y rescate.

Robles ha revelado que si los aviones no hubiesen llegar hasta el aeropuerto civil de la localidad, «colapsado» por la cantidad de tráfico que soporta, estaban haciendo gestiones para que puedan hacerlo en la base aérea militar de Incirlik en la que está desplegado un contingente español de 150 efectivos desde hace años junto a una batería antimisiles Patriot.

«Es evidente que en estos momentos los rescates de personas son esenciales y no se puede perder tiempo. Llevan equipos adecuados para el rescate y la idea que tiene tanto UME como Bomberos es, desde el mismo momento en que lleguen, ponerse a realizar operaciones de rescate», dijo Robles este lunes.

Asimismo, ha alabado la «moral, fuerza y compromiso» de los profesionales españoles que se han desplegado en la zona para ayudar al rescate de víctimas. «Son gente muy preparada», ha destacado.