El hopital Álvaro Cunqueiro, situado en la parroquia viguesa de Beade
El hopital Álvaro Cunqueiro, situado en la parroquia viguesa de Beade - abc

El Parlamento gallego rechaza la creación de una comisión de investigación sobre el Cunqueiro

Los votos en solitario del PP han tumbado la propuesta de BNG y AGE sobre el hospital vigués

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El rechazo de la mayoría parlamentaria que ostenta el PP en el Parlamento gallego ha evitado la creación de la comisión de investigación sobre el proceso de construcción y puesta en funcionamiento del nuevo hospital Álvaro Cunqueiro de Vigo propuesta por BNG y AGE. Las diputadas de sendos grupos, Montse Prado y Eva Solla respectivamente, han agradecido la presencia de unos 300 manifestantes en las puertas de o Hórreo, señalado la «polémica» en la que se ha visto envuelto el nuevo centro de la ciudad olívica. Ambas centraron sus reproches a la Xunta en el supuesto sobrecoste sobre el proyecto inicial, la infrautilización de las nuevas instalaciones y las dificultades en los traslados o desperfectos conocidos en las últimas semanas.

Por su parte, tanto la bancada socialista como el grupo mixto han apoyado esta propuesta, pero han optado por enfocar sus críticas en aquellos que sitúan como responsables de la situación. La representante del PSdeG Carmen Acuña ha afeado la ausencia del presidente de la Xunta en el hemiciclo y tirado de eslogan para calificar el nuevo centro de «Hospital PP: pequeño y privado». Por su parte, Carmen Iglesias, ha utilizado una metáfora médica para tachar a Rocío Mosquera de «conselleira en fase terminal».

El encargado de argumentar la negativa popular fue el diputado Miguel Santalices, que ha refutado los puntos más controvertidos de los postulados de la oposición. Ha tildado el traslado de «seguro y supervisado por profesionales del Sergas», recordado que «no solo se han perdido unidades de referencia, sino que se ganarán otras como la de trastorno de la conducta alimentaria o de ictus». En el capítulo financiero, ha apuntado que el modelo de cooperación público-privada también fue explorado por el bipartito para ejecutar el proyecto y que el coste total será «muy inferior» al que se refiere la oposición, y lo ha cifrado en unos 600 millones de euros frente a los 1.250 que desliza la izquierda parlamentaria.

Santalices ha pasado al ataque y afeado a los socialistas el «obstruccionismo» que se ha encontrado de la administración viguesa en cuanto a la cesión de terrenos o la «negación de agua y luz» para la ejecución de las obras. En el mismo sentido, ha pedido «responsabilidad» a su líder, José Ramón Gómez Besteiro, al hablar de cuestiones médicas, razonando que «no vale poner muertos encima de la mesa o que un concejal diga que tiene miedo de ir a un hospital».

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