Kevin Spacey, acusado de cuatro agresiones sexuales, queda en libertad hasta la próxima vista

Kevin Spacey respira un poco más tranquilo. El juez Tanweer Ikram del Tribunal de Magistrados de Westminster, en Londres, le ha dejado en libertad sin fianza este jueves después de la lectura de los cinco cargos a los que se enfrenta tras las cuatro acusaciones por agresión sexual y uno más por penetración no consentida a otro hombre.

A su llegada a la vista preliminar, con un séquito de guardaespaldas, el actor estadounidense se ha mostrando calmado y con la seguridad de que saldrá victorioso. Su abogado, Patrick Gibbs , así lo ha trasmitido en sala judicial: «El actor niega firmemente cualquier actividad delictiva en este caso».

Fue a finales del mes de mayo cuando la Fiscalía de Reino Unido anunció su decisión de procesar a Kevin Spacey por cuatro delitos de abuso sexual al actor. En concreto, los hechos tuvieron lugar entre 2005 y 2013 cuando el actor ejercía de director artístico en el emblemático teatro Old Vic de Londres. Los tres denunciantes, de edades comprendidas entre los 30 y los 40 años, acusan al veterano intérprete de agresión sexual. Dos de los cargos son de 2005, otro de 2008 y el último, habría ocurrido en abril de 2013 en Gloucestershire (suroeste de Inglaterra).

En 2017, el actor Anthony Rapp le denunció también por agresión sexual en un evento en Manhattan que tuvo lugar en 1986, cuando aún era menor. Razón por la que fue apartado de la serie 'House of Cards'. Tras esto, decenas de jóvenes se animaron a alzar la voz en contra de los abusos de Spacey, entre ellos, el hijo de Richard Dreyfuss , Harry. Aseguró que le había manoseado. «Spacey me tocó cuando tenía 18 años. Él sabía que podía manosearme en un cuarto donde estaba mi padre presente y que no diría nada. Él sabía que no tendría el coraje para decirlo. Y no lo hice», dijo entonces.