La noche flamenca de los Obama en Madrid
El expresidente estadounidense y su familia disdrutaron de una cena en un restaurante de El Pardo, que se cerró con una actuación de Pitingo
La familia Obama que se encuentra en Madrid disfrutando de unos días en la capital española. Mientras Barack Obama cumple con una agenda casi repleta de encuentros, su mujer Michelle y sus hijas, Sasha y Malia , disfrutan la ciudad compaginado la gastronomía con el arte .
Durante la jornada del viernes 6 de julio, el exmandatario estadounidense tuvo que seguir un horario de lo más ajustado para cumplir todas sus citas. Desde su intervención en dos cumbres sobre Economía Circular e Innovación -una en Madrid y otro en Oporto- y varios encuentros con políticos, como el presidente Pedro Sánchez , y directivos que querían compartir unos minutos con él.
Por su parte, Michelle Obama y sus hijas disfrutaban del encanto de la capital. Se dejaron envolver por el arte de los museos madrileños más importantes, el Prado y el Thyssen. En el Prado recorrieron las salas dedicadas a Velázquez y a Goya; entre las obras que contemplaron figuran «Las Meninas» y «Los fusilamientos del 2 de mayo». Después probaron la gastronomía italiana del restaurante Numa Pompilio y descansaron en el Café Murillo, muy cercano al Jardín Botánico.
Sin embargo, las cenas se hacen en familia, tal y como demostraron ayer los Obama. Tras una recepción en la casa que el exembajador de EE.UU., James Costos, y su marido, el decorador Michael Smith, mantienen en el barrio de Salamanca -en la que estuvieron el duque de Alba, Penélope Cruz o Pedro Almodóvar -, disfrutaron de una cena en el restaurante Filandón, ubicado en El Pardo, según recoge Martín Bianchi en «Hola».
El plato fuerte de la noche, vino de la mano del cantante Pitingo . El mismo ha compartido una publicación en su perfil de la red social Instagram, en la que agradecía poder haber actuado para ellos. «Dos personas maravillosas que han cambiado la historia del mundo y cuando te ves delante de ellos cantándoles, te falta la respiración y te pasan tantas cosas por la cabeza que no sabes por dónde empezar», de este modo tan afectivo describía el cantante los sentimientos que la familia Obama despertaba en él.
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