Las joyas portuguesas de Julia Roberts

La actriz de Hollywood declara su predilección por la diseñadora lusa Luísa Rosas

CORRESPONSAL EN LISBOA Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

A Julia Roberts le encanta lucir joyas portuguesas. Se las pone siempre que tiene ocasión: sesiones para revistas, entregas de premios, apariciones públicas… La 'culpable' no es otra que la diseñadora Luísa Rosas, convertida en su favorita cuando se trata de aunar estilo y elegancia en la elección de colgantes, anillos, broches y pendientes.

Nacida en el seno de una familia de gran tradición en la alta joyería lusa, esta mujer goza de un creciente prestigio en el sector, cada vez más fuera de las fronteras portuguesas. Y lo hace desde su tienda central, en plena Avenida da Liberdade de Lisboa, ciudad donde mantiene abierta otra más. Dos en Oporto, una en el Algarve y una en Funchal (Madeira) completan su oferta, en la que no faltan relojes y accesorios diversos.

La última colección de Rosas ha resultado determinante para que la actriz norteamericana cayese rendida a sus pies. La propia Luísa pensó en la protagonista de 'Pretty woman' o 'Notting Hill' en cuanto terminó los diseños.

Muy satisfecha con los resultados, se marcó el objetivo de llegar a Hollywood a través de los emisarios que pudo localizar. No paró hasta dirigirse a la asistenta personal de Roberts… Y entonces vio recompensado su tesón: la ex pareja cinematográfica de Richard Gere mostró enseguida su predilección por estas joyas, pues efectivamente se adaptan a su estilo como anillo al dedo.

A partir de ahí, los pedidos especiales se han sucedido desde Los Ángeles para regocijo de una Luísa Rosas en clara progresión. De hecho, ha declarado: «No me ha desilusionado en absoluto el contacto que he tenido con Julia Roberts. Es una persona que sólo podría estar rodeada de buenos profesionales porque su relación se hace más fácil con ellos».

Su meticulosidad la lleva a controlar todo el proceso de la producción de piezas, hasta que llegan a su destino. Aprendió el oficio de su madre y lleva camino de transmutar su marca 'David Rosas' en un verdadero imperio del buen gusto, con el 'made in Portugal' por bandera.

«Valoro mucho la experiencia adquirida de manera informal y el conocimiento desarrollado a lo largo de estos años en el negocio familiar», explica en su web la propia Luísa, quien proviene de la arquitectura.

«La libertad de crear sin condicionantes» constituye el legado principal heredado de su anterior etapa, semilla para otorgar su sello característico en el nuevo rostro de la firma, que se denomina 'David Rosas, design Luísa Rosas'.

Ahí, en esta línea ascendente, se inscribe su trabajo para Julia Roberts, que ella misma se ha encargado de reservar en términos exclusivos desde que la cotizada actriz le mostró su reciente fidelidad.

Otra de las razones que la han llevado a este 'flechazo' estético se centra en que Hollywood no había reparado hasta ahora en la labor de Luísa Rosas, con lo cual puede presumir de engalanarse con unas joyas distintas.

Se da la circunstancia de que Roberts interpretó en 1988 a una de las tres camareras de origen portugués que daban vida a la película 'Mystic Pizza', de Donald Petrie.

Sus andanzas en una localidad del Estado norteamericano de Connecticut llegaban con el telón de fondo de un pequeño pueblo de pescadores que se remontaban a la emigración lusa.

Ver los comentarios