Charlène de Mónaco cumple 40 años con un matrimonio cuestionado

Charlène de Mónaco , que este jueves cumple 40 años, y el Príncipe Alberto conforman un matrimonio nada convencional . Desde que se dieron el «sí, quiero» en 2011, la opinión pública no ha hecho más que poner en entredicho su desposamiento. Comidilla de la crónica social europea que solo cree que fue un enlace de mutuo interés y no por amor.

En su momento, incluso la prensa francesa aseguró que la exnadadora sudafricana había firmado un supuesto contrato prenupcial, comprometiéndose a estar a su lado y darle un heredero . Pero no solo le dio uno, sino dos: los mellizos Jaime y Gabriela , nacidos el 10 de diciembre de 2014 . Unos niños que no han conseguido acallar las rumorologías.

Han pasado 14 años desde que el Príncipe Alberto y Charlène de Mónaco se conocieron por vez primera en un campeonato de natación. Tardó mucho en decidirse a dar el paso y pedirle la mano y ahora que llevan siete de casados, aún se cuestiona. Pese a que no han dado muestras de separarse, los rumores no han cesado y se habla más del desapego que tiene a su marido que de su representación.

Parece una vida muy lejana. La década de los 30 supuso un gran cambio en Charlène de Mónaco, nacida en Zimbabue. Pasó de tener aspiraciones olímpicas a convertirse en princesa y sucesora de Grace de Mónaco. Dejó su país para pasar el resto de su vida en el Principado.

Cambió su forma de vestir y sufrió una gran trasformación física por los varios retoques estéticos a los que se sometió en los últimos años. Se convirtió en todo un icono y símbolo de elegancia, siendo una de las princesas más cercanas y naturales de Europa. «Aprender a cuidar mi manera de vestir fue un reto. Vivía con trajes de baño y ropa deportiva, nunca había usado un vestido de noche...», explicó a Vanity Fair.