Los Beckham apagan con un despido el fuego de su última crisis

La pareja zanja los rumores de separación con fotografías que reflejan lo mucho que se quieren

El matrimonio Beckham, en el enlace de los Duques de Sussex Reuters

Dolores Molina

En pleno Mundial de Rusia, no resulta extraño hablar de los ases de balón y de sus parejas. Sin embargo, llama la atención que quien ha copado todos los titulares estos últimos días haya sido uno ya en el retiro: David Beckham (43). El excentrocampista y su mujer, Victoria Beckham (44), han vuelto a protagonizar una serie de comentarios que atizaban su última crisis matrimonial. Y no sólo por lo que se decía en las redes sociales. Días atrás, incluso las casas de apuestas británicas echaban envites sobre cuánto les quedaba juntos.

Ellos, maestros en proyectar una imagen impoluta de pareja amantísima y familia feliz , enseguida se pusieron manos a la obra para apagar el incendio mediático y comenzaron a subir fotos a sus respectivas cuentas de Instagram con mensajes en los que reflejan el amor que se profesan y lo unidos que están a sus cuatro hijos: Brooklyn (19), Romeo (15), Cruz (13) y Harper (6). En paralelo, también desataron una «caza de brujas» subterránea para desenmascarar al traidor que puso en circulación el último chisme. En este caso, traidora. Según recoge «The Mirror», una de las chicas que trabajaba en su equipo de relaciones públicas fue quien encendió la mecha de la crisis: al parecer, mandó correos electrónicos a su familia hablando de las crecientes desavenencias de los Beckham.

A prueba de todo

Corría el año 1996 y Victoria triunfaba en la girl band del momento: las Spice Girls. Según relató para la revista «Vogue», lo suyo fue amor a primera vista . Ambos se encontraban en un reservado para los jugadores del Manchester United y, tras un cruce de miradas, él se acercó a pedirle su número. Aunque Victoria había bebido , acertó a escribirlo en su billete de avión, documento que aún conserva. Tres años después se casaron y, desde entonces, han afrontado innumerables «chascarrillos» de separación.

David Beckham y Victoria Adams, en una foto de archivo, cuando anunciaron su comprimiso EPA

El hecho es que la mayoría del tiempo viven separados debido a sus diferentes situaciones laborales. David pasa gran parte del año viajando por todo el mundo, «atado» a sus compromisos publicitarios -ahora está en Milán- y Victoria permanece en Reino Unido al cuidado de sus retoños y consagrada a su imperio: la diseñadora firmó hace unos meses un acuerdo de inversión de 33,5 millones de euros con Neo Investment Partners -empresa del exbanquero David Bellhassen -, que tasó la marca en más de 100 millones de euros.

Pese al clima que les envuelve, el matrimonio siempre ha sabido reponerse a las adversidades, ya se trate de simple rumores o de personas muy reales. Durante la época que el deportista vistió la camiseta del Real Madrid, fue relacionado con más de una chica, siendo Rebecca Loos la que acaparó toda la atención. Victoria Beckham no aguantaba «el olor a ajo de España» y regresó a su Reino Unido natal, dejando a David solo en Madrid. Entonces, la que fuera su asistente y niñera de sus hijos mantuvo un idilio con el astro del balón. Lejos de arrepentirse, Loos aireó algunos de sus encuentros a «News of the world» y llegó a asegurar que el jugador la «engañó» a su vez con Esther Cañadas , modelo con la que se mandaba mensajes «explícitos».

Esta situación casi acaba con el matrimonio, pero, tras algunas sesiones de terapia, David y Victoria superaron el bache, más allá de la sensacional revelación de Ana Obregón . La actriz y bióloga dijo que se mandaba mensajes con el exjugador y que llegaron a «dormir juntos, aunque no tuvimos relaciones sexuales».

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