PSA condiciona el lanzamiento de nuevos modelos al desbloqueo urbanístico deVigo

Citroën Vigo necesita una garantía legal de que podrá ampliar su planta y poder así ofrecer al grupo galo soluciones de industrialización. La actual situación urbanística de la ciudad tiene paralizada, entre otros proyectos de especial interés, la ampliación de la factoría en Balaídos a la que la delegación de la firma automovilística condiciona sus futuros lanzamientos. Es el caso del K9, la nueva generación de furgonetas que comenzarán a fabricarse a partir de 2017. La advertencia lanzada ayer por el director de la fábrica viguesa, Yann Martin, no ocultaba su intención: «Si no se encuentra una solución a lo largo de este 2016 podemos tener un grave problema».

Visiblemente preocupado, Martin fijó como plazo límite el segundo semestre de este año para tener definida una alternativa a la anulación del Plan General de Ordenación Municipal (PGOM).

La decisión tomada por el Tribunal Supremo determinó que el planeamiento carece de la preceptiva Evaluación Medioambiental y, en consecuencia, declaró sus documentos aprobatorios«radicalmente nulos». Así las cosas, la aplicación del desarrollo urbanístico inmediatamente anterior (el de 1993) ha supuesto para Citroën, que maneja una producción para el presente ejercicio de entre 385.000 y 427.000 unidades y da empleo directo a unos 6.000 trabajadores, el bloqueo de sus planes de expansión. Al menos por el momento y hasta que solucione la situación.

«Es responsabilidad de todos encontrar una salida al proyecto de ampliación —acordado con Concello y Zona Franca—. Estamos trabajando, conjuntamente con la administración autonómica y local, para conseguir un futuro en el que hay muchos empleos en juego», señaló el máximo responsable de la factoría olívica.

Ley de suelo

La vía más clara para sortear la anulación y desbloquear urbanísticamente proyectos estratégicos, entre los que se incluyen además del polígono de Citroën, la estación intermodal de AVE y de autobuses, la conexión directa de Alta Velocidad Vigo-Madrid y la Avenida de Madrid, pasa por la modificación del artículo 144 de la Ley del Suelo de Galicia, que Alternativa Galega de Esquerdas (AGE) se ha encargado de tumbar. La enmienda técnica defendida por los populares en O Hórreo precisaba, para ser tramitada, del apoyo unánime de todos los grupos.

Las palabras pronunciadas ayer por Yann Martin encontraban contestación en el grupo parlamentario del PP a través de su portavoz, Pedro Puy, quien negó que su planteamiento suponga «una barra libre urbanística», tal y como esgrimió AGE para justificar su postura, y avanzó que «la norma se aprobará este mes o el siguiente porque cuenta con todas las garantías». Es más, la intención de los conservadores en la Cámara gallega, para tranquilidad de Citroën, es la de incorporar la enmienda en el próximo pleno, cuando se apruebe definitivamente la Ley de Suelo. De no poder ser, Puy dejó claro que saldrá adelante en una nueva modificación por el trámite de urgencia, que garantizaría la realización de proyectos de especial interés público siempre y cuando haya acuerdo entre las administraciones implicadas, como es este el caso.

También el alcalde de Vigo arremetía contra la decisión de AGE responsabilizando directamente a su portavoz, Xosé Manuel Beiras, de la posible pérdida de «miles de empleos».

«Responsabilizo personalmente a Beiras de todo lo que suceda en Citroën y en Vigo, porque es quien impide que resolvamos una cuestión de primera magnitud para generar miles de empleos en la primera industria automovilística de España», proclamó este lunes el socialista Abel Caballero.

El primer edil vigués censuró que la actitud de AGE —que apuesta por solucionar la situación por la vía de declararlo de incidencia supramunicipal y no de reformar la ley como pactaron PP y PSOE— «pone en riesgo» los futuros proyectos de la factoría viguesa, entre ellos la nueva furgoneta (K9), «sin que se sepa por qué». «Este no es el Beiras que yo conocí hace años y que entendía y cooperaba con la ciudad. Ahora parece estar en posición frontal contra Vigo», sentenció.