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EFE

Puigdemont reconoce la «voluntad de escuchar» de Rajoy

La próxima semana los vicepresidentes del Gobierno y la Generalitat se reunirán para profundizar en algunos de los 46 puntos planteados por Cataluña

MADRID Actualizado: Guardar
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«Cordialidad formal»y «normalidad institucional» en la primera entrevista entre Rajoy y Puigdemont, según la impresión del presidente catalán. Este le reconoce a Rajoy la «voluntad de escuchar» aunque no se atreve a hablar de optimismo. Hay, matizó, «profundas discrepancias» y acaban el encuentro «sin atisbos de acuerdo».

No obstante, tuvo que reconocer algún avance, como el que se produjo ante su petición de un «gesto» en los asuntos en que sí puede haber acercamiento. Para evitar que el documento planteado este miércoles a Rajoy con 46 peticiones concretas se convierta en papel mojado, han planteado una reunión de vicepresidentes la próxima semana, donde abordar los asuntos en los que exista más posibilidad de acuerdo. Puigdemont ha comentado que Rajoy le ha planteado sus dudas sobre la conveniencia de este encuentro por parte de un Gobierno en funciones, a lo que el presidente catalán le ha respondido que él no está en funciones.

Aunque Puigdemont ha comenzado su intervención ante la prensa en un tono mas negativo —«está en las antípodas de lo que yo le he explicado»—, parece que ambos líderes han dejado la puerta abierta a nuevos encuentros si, tras unas nuevas elecciones, Rajoy vuelve a presidir el Gobierno de España.

En todo caso, Puigdemont ha insistido en su petición de que acabe lo que considera «un abuso de la judicialización de la política». Y no tiene claro que con otros líderes políticos sus reivindicaciones territoriales fueran mucho mejor acogidas: tras hablar con Rivera, Sánchez e Iglesias, su conclusión es que ninguno de ellos sabe qué reforma constitucional haría ni con qué mayoría.

En el documento entregado por el presidente de la Generalitat a Mariano Rajoy, destacan una serie de reclamaciones como que se deje a Cataluña celebrar una consulta sobre la independencia y que el objetivo de déficit para este año sea del 1,07 por ciento.

En materia económica Puigdemont, además del déficit, pide un mayor margen para la consolidación fiscal y más recursos financieros, así como la revisión del sistema de financiación autonómico y el establecimiento de un interés al 0 por ciento para el Fondo de Liquidez Autonómica (FLA). Se cifra en 842 millones de euros el dinero que, según este documento, ha dejado de recaudar anualmente la Generalitat catalana debido a los recursos presentados por el Gobierno a normas autonómicas, como el impuesto a los depósitos bancarios o el impuesto nuclear.

Refugiados

El documento del Gobierno catalán hace alusión a la llegada de refugiados. Recuerda el texto que Cataluña podría recibir a 4.500 personas, pero denuncia acto seguido que el Gobierno de Mariano Rajoy no ha transmitido ninguna información al respecto, a pesar de que la comunidad tiene competencias exclusivas en esta materia. Asimismo, protesta también porque el Gobierno español haya anulado el Fondo estatal de acogida, que hubiera reportado a Cataluña 43,5 millones de euros.

También reprueba la reducción de la financiación en políticas sociales, que cifra en un 91,7 por ciento desde 2010, así como la financiación «insuficiente» que concede la administración central para el sistema de dependencia, hasta dejar su aportación en algo más de un 18 por ciento.

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