Báñez repite en Empleo para culminar la batalla contra el paro y apuntalar el futuro de las pensiones

La ministra de Empleo y Seguridad Social, Fátima Báñez, continuará al frente de esta cartera, una de las más importantes y más sufridas. En las quiñielas ha sido una de las más firmes candidatas a continuar en el nuevo Ejecutivo, tal y como ha sido. Finalmente, no ha cambiado de cartera, como se venía especulando. Esta onubense inició su carrera en Andalucía de la mano de la exalcaldesa de Cádiz Teófila Martínez, con quien recorrió todos los rincones de la región y de quien aprendió que la política «es dialogar y trabajar mucho».

Discreta y leal a Mariano Rajoy, ha ganado protagonismo en el seno del Ejecutivo del PP según avanzaba la legislatura recién terminada. No en vano, fue una de las personas elegidas por el presidente del Gobierno para negociar el reciente acuerdo con Ciudadanos que permitirá a Rajoy repetir en La Moncloa.

En este sentido, Albert Rivera había mostrado su anuencia a que continuará dentro del Gobierno.

Al frente del Ministerio de Empleo y Seguridad Social, en el que continuará, ha vivido dos etapas muy diferentes. Los primeros años fueron dificilísimos, para ella y para el Gobierno, ya que la reforma laboral aprobada por el Ejecutivo solo dos meses después de tomar posesión parecía que no tenía el efecto deseado en el mercado laboral. Los 4,4 millones de parados registrados en los servicios públicos de empleo cuando estrenó su cartera ministerial en diciembre de 2011 se dispararon hasta el máximo histórico de 5,04 millones en febrero de 2013. A partir de entonces, el desempleo ha ido descendiendo por esa reforma y, sobre todo, por la recuperación económica del país. Actualmente, hay 702.062 parados menos (3,7 millones) que cuando se estrenó como ministra.

El verbo dialogar es uno de sus preferidos. De ello pueden dar fe, sobre todo, los sindicatos y la patronal, con quienes mantiene una excelente relación. La interlocución con Toxo (CC.OO.), Álvarez -anteriormente con Méndez- (UGT), Rosell (CEOE) y Garamendi (Cepyme) es frecuente, directa y muy cordial. Incluso, va más allá y a varios de ellos les felicita todos los años el día de sus respectivos cumpleaños, a pesar de que no había cumplido ni cien días en el Ministerio cuando esos sindicatos convocaron una huelga general contra la reforma laboral.

Madre de dos hijos de nueve y doce años, procura dedicarle el tiempo necesario a sus vástagos. Por ello, lo habitual es que les acompañe tanto en el desayuno como en la cena en la casa que tiene la familia a las afueras de la capital. Desde que es ministra viven los cuatro en esa vivienda pero antes, durante muchos años, desde que fue elegida diputada del Congreso en 2000, residía ella sola en Madrid, desde donde se trasladaba hasta Huelva todos los fines de semana que podía.

Licenciada en Derecho y en Ciencias Económicas y Empresariales por la Universidad Pontificia de Comillas, cumplirá 50 años un día tan señalado como la próxima festividad de los Reyes Magos.