El secretariogeneral de UGT, Cándido Méndez (i), con su homólogo de Cataluña, José María Álvarez (d)
El secretariogeneral de UGT, Cándido Méndez (i), con su homólogo de Cataluña, José María Álvarez (d) - EFE

El catalán José Álvarez, favorito para suceder a Cándido Méndez en UGT

Varias federaciones rechazan a Miguel Ángel Cilleros, el candidato oficialista

Madrid Actualizado: Guardar
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Cándido Méndez está viviendo sus últimos cien días al frente de UGT y la carrera por su sucesión ya se está haciendo patente. El pistoletazo de salida lo dió hace unos días el secretario general de la federación del Metal, Construcción y Afines (MCA-UGT), Carlos Romero, quien dijo públicamente que propondría a José María Álvarez, secretario general de UGT-Cataluña, para que presentara su candidatura para dirigir el sindicato.

El proceso, que culminará entre el 9 y el 12 de marzo de 2016 en el 42 congreso de UGT, pondrá fin a la etapa de 21 años como secretario general del sindicato de Cándido Méndez.

José María Álvarez ha manifestado en reuniones recientes que «no he dicho que no» a la propuesta de los compañeros de MCA-UGT, la cual, ha sido apoyada posteriormente por la federación de Servicios Públicos (FSP-UGT) y por las federaciones de Asturias y Comunidad Valenciana.

Álvarez es un veterano sindicalista que lleva 25 años al frente de UGT-Cataluña y que había anunciado este verano que dejaría el cargo en abril de 2016. Su ascenso a la secretaría general del sindicato sería un premio a su trayectoria, aunque en su contra tiene la edad, ya que una semana después del 42 congreso cumplirá 60 años, tan sólo tres menos de los que tendrá Cándido Méndez.

Hay que recordar que cuando éste anunció públicamente hace poco más de un año que no se presentaría a una nueva reelección (fue elegido por primera vez en 1994), afirmó que su sustituto debería aunar «juventud y experiencia».

Álvarez apoyó a «Lito»

Por eso se pensó en ese momento en Miguel Ángel Cilleros, secretario general de la nueva federación de Servicios para la Movilidad y el Consumo (SMC-UGT), resultante de la fusión de las federaciones de Transportes, Comunicaciones y Mar (TCM) con la de Comercio, Hostelería, Turismo y Juego (CHTJ). Curiosamente, Cilleros fue la única persona que acompañó a Méndez cuando compareció ante la prensa para anunciar su marcha.

Sin embargo, la candidatura oficialista de Cilleros, de 53 años, ha ido perdiendo fuerza en los últimos meses en favor de Pepe Álvarez, el cual, ya se enfrentó indirectamente a Cándido Méndez hace veinte años cuando tanto en el 36 congreso confederal de 1994 como en el 37 congreso extraordinario de 1995 apoyó a Manuel Fernández «Lito» en su pugna con aquel por la secretaría general de UGT.

Sobre este sindicato en Cataluña hay que destacar que ha perdido más de 20.000 afiliados en los últimos cuatro años (a finales de 2014 tenía 149.793) y que su presupuesto para 2015 prevé un superávit de 10.020 euros.

«Derecho a decidir»

Su secretario general, José María Álvarez, se ha significado siempre por su apoyo al independentismo catalán; sobre todo, «a su derecho a decidir» y rechaza cualquier injerencia. Por eso no le sentó nada bien las declaraciones que hicieron Cándido Méndez e Ignacio Fernández Toxo contra las ideas secesionistas de algunos partidos catalanes días antes de las elecciones que se celebraron en septiembre pasado en aquella comunidad. UGT-Cataluña emitió un comunicado en el que subrayaba que «Cataluña ha de ser lo que decidan libremente sus ciudadanos. El derecho a decidir se ha constituido como un derecho de primera magnitud. Ni renunciable ni negociable...».

De hecho, meses antes, durante la manifestación del Primero de Mayo en Barcelona, las bases de UGT y de CC.OO. mostraron su perplejidad ante el entusiasta apoyo de sus líderes José María Álvarez y Juan Carlos Gallego al «derecho a decidir» y a «una escuela en catalán».

Carmen Castilla, el futuro

Mientras tanto, quien parece totalmente descartada en la carrera por suceder a Méndez es la secretaria general de UGT-Andalucía, Carmen Castilla. Es la más joven (45 años) y la que tiene menos experiencia. Pero lo que juega más en su contra no es esto, sino los casos de corrupción en los que se ha visto envuelta su federación en los años anteriores a su nombramiento. Los despilfarros, los ERE supuestamente fraudulentos, y las facturas presuntamente falsas se llevaron por delante a sus dos antecesores: Manuel Pastrana y Francisco Fernández.

Algunas fuentes del sindicato apuntan que si esta enfermera y licenciada en Derecho y Psicología consigue «limpiar» y reorganizar la federación andaluza, sería una seria candidata para suceder a medio plazo a Pepe Álvarez en la secretaría general de UGT si se confirmara su elección en marzo de 2016. Sería la primera vez en la historia de España que una mujer estaría al frente de uno de los sindicatos mayoritarios.

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