Un año negro para la construcción: el consumo de cemento cerrará 2020 en niveles de 1966
La patronal del sector reclama al Gobierno un plan específico de ayudas ante el previsible desplome de la construcción
La construcción ha pasado a un segundo plano en esta crisis económica. Pero eso no quiere decir que no vaya a sufrir el impacto de la pandemia. El consumo de cemento, uno de los mejores termómetros para medir la salud del sector, se contrajo un 13,4% entre enero y agosto, hasta las 8.620 toneladas. Y las previsiones apuntan a que a final de año se situará en torno a las 13.000 toneladas, un nivel similar al registrado en 1966 y en los años más duros de la última crisis económica.
Es la estimación que maneja la patronal del sector Oficemen, que ha presentado este miércoles los últimos datos de la Estadística del Cemento. Para el conjunto del año, la asociación estima una caída de entre el 10 y el 12%, una previsión algo más optimista respecto a la realizada en mayo. Entonces, Oficemen aseguró que el consumo de cemento se desplomaría un 20% en el conjunto de 2020.
Pese a la mejora de las previsiones, la patronal estima ahora que la caída «va a ser sostenida», y cree que 2021 «no será el año de la recuperación». «El aumento del déficit y la deuda pública, y el hecho de que los recursos procedentes de la UE, que puedan destinarse a la inversión pública, no empezarán a apreciarse de forma significativa hasta el año 2022, sumado a que, hasta dentro de dos años no se espera recuperar el nivel de visados de vivienda que había en 2019», ha explicado el presidente de Oficemen, Víctor García Brosa.
El mercado exterior no ofrece una instantánea más positiva, porque si bien las exportaciones han evolucionado mejor que el consumo nacioanl en verano, se mantiene en números rojos en el acumulado del año. «La pérdida interanual continúa rondando el millón de toneladas», ha explicado la asociación, que también ha destacado la «incertidumbre» que supone el Brexit para un sector que envía el 20% de sus ventas al exterior a Reino Unido.
Los fondos europeos
Por todo ello, desde el sector del cemento han reclamado al Gobierno un plan específico que incentive la construcción . Entre las medidas planteadas se encuentran la construcción de infraestructuras verdes, un plan de vivienda social para alquileres y programas para facilitar el acceso de los jóvenes a la primera vivienda a través de avales del Estado.
«El sector constructor y sus industrias auxiliares necesitan con urgencia un plan específico de infraestructuras y vivienda que permita, no solo aprovechar el potencial de generación de empleo de la construcción, sino también dinamizar el conjunto de la economía nacional», ha asegurado el presidente de la organización.
Respecto al reparto de los fondos europeos que llegarán a España, la patronal ha reclamado que se destinen a «proyectos maduros» y ha confirmado que solicitó una reunión formal con el ministro Ábalos para tratar estos asuntos.
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