Caixabank ganó 5.226 millones en 2021 por el impacto de absorber Bankia

El beneficio recurrente ascendió a 2.359 millones de euros, frente a los 1.381 millones de un año antes

El último aviso de Caixabank a la mayoría de sus clientes

Gonzalo Gortázar, consejero delegado de Caixabank EP

Daniel Caballero

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Primeras cuentas anuales de Caixabank ya con Bankia plenamente dentro del balance . El beneficio sin extraordinarios, es decir, excluyendo los impactos de la absorción, quedó en 2021 en 2.359 millones de euros, frente a los 1.381 millones de un año antes . Casi 1.000 millones más de ganancias tras dejar atrás un 2020 marcado por las «elevadas provisiones» derivadas de la crisis del Covid-19.

Teniendo en cuenta todos los números del banco, el beneficio total ascendió a 5.226 millones de euros. El dato se dispara al tomar en consideración el impacto de la absorción de Bankia . Concretamente, la entidad se ha apuntado una aportación contable de 4.300 millones del fondo negativo de comercio y ha de restar el coste neto de 1.433 millones derivados del ajuste de plantilla y la integración.

En Caixabank celebran estos números y la manera en que se ha llevado a cabo la integración. Y, ahora, miran directamente al dividendo: «El consejo de administración de la entidad ha acordado proponer a la próxima junta general de accionistas la distribución de un dividendo en efectivo de 0,1463 euros brutos por acción, con cargo a los beneficios del ejercicio 2021, a abonar durante el segundo trimestre del 2022». Con ello, el importe de la remuneración al accionista correspondiente al ejercicio 2021 será de 1.179 millones de euros , equivalente al 50% sobre el resultado consolidado ajustado por los impactos extraordinarios de la fusión con Bankia.

Para 2022 la intención es una distribución de dividendo del 50-60% del beneficio neto consolidado y la entidad ha anunciado también su intención de acometer un programa de recompra de acciones en el mercado.

En términos de rentabilidad, Caixabank cerró el año con una mejoría también considerable. El ROE quedó en el 6,4% y el ROTE en el 7,6%, lo que supone 1,4 y 1,5 puntos más respectivamente . Asimismo, tanto el margen de intereses como el margen bruto han crecido más de un 20% ambos en términos interanuales, mientras que las comisiones netas lo han hecho en más de un 43%.

La ratio de solvencia CET1 quedó en el 13,2% y la ratio de morosidad continuó contenida en el 3,6% ya que aún no han aflorado realmente los deterioros derivados de la crisis del Covid.

Gonzalo Gortázar, consejero delegado de la entidad, ha puesto en valor las cifras y ha señalado los retos para 2022: «Iniciamos un ejercicio en el que deberemos materializar las sinergias de costes e ingresos derivadas de la fusión y plantear las líneas estratégicas de la entidad para los próximos años. Lo haremos en un entorno complejo, pero con la seguridad de disponer de una magnífica base de partida y la confianza de que vamos por el camino adecuado». José Ignacio Goirigolzarri, el presidente, por su parte, ha destacado han cumplido con sus objetivos, «tanto en término de equipos, como de nuestras plataformas tecnológicas, y también de nuestros modelos de distribución».

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