La labor fundamental de los sparrings

Alejandro García Cenzano es sparring y comenzó a jugar al tenis con solo seis años, en un pequeño club del barrio de Ventas (Madrid). Luego lo ficharon en Chamartín, donde compitió hasta los 18. Este tenista ha centrado su carrera profesional en entrenarse y en viajar como 'Oficial Hitting Partner' o sparring; es decir, los jugadores que ponen los torneos a disposición de los tenistas participantes, si estos así lo desean. Este joven narra para ABC Daily cómo llegó hasta un oficio que le ha permitido compartir pista con los más grandes de la ATP y la WTA, como Rafa Nadal, Garbiñe Muguruza , Victoria Azarenka, Dominic Thiem o Carlos Alcaraz: «Es difícil y hay que tener un nivel alto, pero me ha servido para adquirir conocimientos de grandes entrenadores de la WTA . Hay semanas que trabajo con algunas jugadoras de forma privada, como con Garbiñe Muguruza; y he preparado la pretemporada con Tamara Zidansek». El madrileño ha alternado ser sparring con entrenar a tiempo completo: «Cuando dejé de competir decidí entrenar. He trabajado 'full time' cuatro años con una tenista. También he viajado a casi todos los torneos como sparring: Indian Wells, Cincinnati, Miami o Madrid».

Reconoce que su secreto para ser uno de los sparrings más regulares del torneo es adecuarse bien a lo que cada jugador pide y necesita. «No es lo mismo un tenista que, por ejemplo, usa asiduamente el revés cortado que otro que no lo hace, o los que tiene más efecto en el segundo saque. Un sparring debe imitar a los contrincantes del tenista con el que entrena , y también, adaptarse al mismo», explica el jugador en el Mutua Madrid Open .

Un compañero de peloteo, como algunos conocen a esta figura, no solo debe adaptarse e imitar a los contrincantes, sino también al ambiente y las circunstancias de con quienes entrenan: «Hay que mezclarse con el entorno. La presión es alta los días previos al partido , es cuando hay que competir y hay nervios». También depende del carácter que tenga cada jugador. «Hay que adaptarse, algunos son menos relajados y otros que se lo toman con calma. Pero como sparring tienes que evadirte y centrarte en tu trabajo», comenta García Cenzano.

Los sparring comparten tiempo, pista y en ocasiones amistad con los jugadores de tenis más laureados del mundo. Aunque sienten mucha presión en algunos momentos, suelen ser experiencias enriquecedoras. «Jugar con Nadal fue uno de los mejores momentos que me ha dejado el tenis. Su juego fue increíble y él es como se le ve fuera de la pista, siempre me pregunta qué tal cuando lo veo. Es amable y humilde. Un diez como persona», relata con orgullo. También ha entrenado con figuras españolas emergentes del torneo como Paula Badosa y Carlos Alcaraz: «Paula es la número dos, desde hace pocos años ha desplegado un tenis increíble. Por otro lado, tuve la oportunidad de entrenar con Carlos en Indian Wells y le veo muy centrado y metódico. Es muy joven pero tiene los pies en la tierra y es muy humilde, a este paso seguirá en el top ten mucho tiempo».

Hay entrenadores que comenzaron como 'Hitting Partners' como el entrenador de Serena Williams, Jarmere Jenkins. Cenzano quiere seguir sus mismos pasos: «En un futuro, desde luego, quiero intentar ser 'coach' de la WTA. Ya he viajado durante cuatro años para formarme, ahora tengo la oportunidad de seguir viajando algunas semanas y eso te aporta un gran aprendizaje».